Lo que cuentan los jugadores del Madrid de la relación Benítez/ Ronaldo

El vestuario del Madrid es un espectador activo. La relación entre Cristiano Ronaldo y Rafa Benítez no mejora. El arranque de pretemporada estuvo minado de pasajes que han hecho mella a un relación torcida desde que aún no era oficial que Rafa sería técnico del Real. Cristiano añora a Ancelotti, no acepta los privilegios de Gareth –no olvida la visita a Bale en Gales antes que a nadie- en el equipo, critica un método robotizado que no deja lugar a la improvisación, afirma que su posición en el terreno de juego se ha visto amenazada desde la llegada de Rafa con un dibujo que no saca lo mejor de su juego, lastrando sus opciones de cara a puerta.

El vestuario es muy consciente de que la relación de CR7 con Benítez está cogida con pinzas –con la presidencia no es mucho mejor-. Los comentarios que circulan en la plantilla avisan de una situación de tensión a la espera de que Cristiano encuentro el camino del gol. Ronaldo lleva peor que mal no haberse estrenado aún en competición oficial. Fuentes presenciales advierten que su cara al término del encuentro ante el Betis era todo un poema: el ‘7’ del Madrid necesita sentirse importante en equipo. De poco, o nada, le sirve que el equipo si lleve los tres puntos con goleada si él no está entre los elegidos.

La incomodidad existente entre crack y técnico arrastra a un grupo que avisa de tormenta si Cristiano no perfora pronto la portería rival o la trayectoria del equipo no se tuerce: Ronaldo admitió seguir un años más bajo la condición de ser el líder, el único, de un equipo ganador que lo encumbrara a las alturas. De no ser así, habrá follón.