Las charlas con el Cholo (no contadas), motivo del adiós de Raúl García

Las charlas con el Cholo (no contadas), motivo del adiós de Raúl García

Pese a la insistencia del entrenador, el centrocampista ya es historia en el Atlético de Madrid

Raúl García es futbolista del Athletic Club de Bilbao. Esta frase parecía imposible de ser cierta hace tan sólo 48 horas, hasta que el Cholo Simeone decidió dejar al jugador fuera de la convocatoria ante el Sevilla, en un movimiento más que extraño que sólo podía ser consecuencia de un cambio de última hora en torno al futuro del número '8' del Atlético de Madrid. Así era. Tras un partido intenso en lo futbolístico y también en lo emotivo, con contínuas referencias hacia el futbolista en la celebración de los goles del equipo, el técnico confirmó que se marchaba al equipo vasco.

 

Pero, ¿qué ha hecho que las cosas cambien tan radicalmente y en tan pocas horas? Sin duda, la postura del futbolista en cuanto a sus conversaciones con el Cholo, que ahora vende una imagen pacífica de la salida de Raúl García, tremendamente felicitado y honrado tanto por él como por sus compañeros; Finalmente no había aceptado ser un 'Bulldog' para Simeone, una solución alternativa y secundaria en según qué partidos de la temporada.

 

Tal y como contamos en este medio, Raúl García se estaba pensando marcharse al Athletic, donde tendrá un papel capital y será tan importante o más que en sus primeros días de su segunda etapa de rojiblanco en la Ribera del Manzanares. Lo hacía porque le queda 'poco', porque consideraba que quedarse como suplente en un equipo tan reforzado este año como el colchonero iba a suponer su progresivo y prematuro 'enterramiento' como futbolista de primer nivel, a sólo unos meses de una Eurocopa en la que cree que tiene posibilidades de ir convocado.

 

Simeone quería a Raúl porque es un jugador que muestra muy bien sus condiciones sobre el césped: Agresividad, fuerza física y músculo en partidos embarullados, un tipo capaz de subir las revoluciones del ambiente sólo con su presencia. Una especie de 'mano derecha del Cholo' sobre el pasto, un capitán sin brazalete. Pero eso no bastaba para él. Así se lo hizo saber en privado y así se ha consumado su salida, mirada desde la preocupación e incluso criticada por muchos aficionados, que ven en su marcha un claro debilitamiento de un centro del campo ya de por sí envejecido y dominado todavía por una pareja tan veterana como Tiago-Gabi. Simeone ha apostado, en lugar de eso, por los delanteros. Veremos qué tal le sale.