Benítez deja claro cuál es su papel real en el Madrid tras el caso De Gea

Benítez deja claro cuál es su papel real en el Madrid tras el caso De Gea

El técnico, distanciado en todo momento de las operaciones, ni se pronunció antes ni tampoco ahora sobre el tema y su discurso es totalmente de club

Rafa Benítez se encuentra estos días en el Foro de entrenadores de la UEFA en Nyon (Suiza), un encuentro que el organismo del fútbol europeo organiza cada año para que los técnicos de los mejores clubes de Europa compartan vivencias y su experiencia. El entrenador del Real Madrid trata de mostrarse ajeno a toda la polémica que ha salpicado a su club en torno al frustrado fichaje de David de Gea y la 'guerra' de acusaciones entre los blancos y el Manchester United acerca de los fallos en la gestión de dicha operación.

 

Un asunto que 'toca' directamente al preparador madrileño porque, a 31 de agosto, Benítez iba a perder de forma efectiva al portero al que había escogido como titular en los dos primeros partidos oficiales de la temporada. El técnico, lógicamente, había mostrado toda su confianza en Keylor Navas y así lo había manifestado públicamente. Haber hecho lo contrario habría sido un ejercicio de torpeza por su parte, dado que debía aferrarse a lo que tenía y tiene, no a lo que pudiese llegar.

 

Sin embargo, resulta evidente que pese a tratarse de decisiones de las altas esferas del club, el técnico tendría algo que decir al respecto. No hubiera sido fácil para él cambiar sus planes con respecto a la portería y con la campaña ya empezada. Prefiere, sin embargo, seguir practicando su mismo discurso desde el primer día que llegó: "Yo trabajo para el Real Madrid y lo hago con los jugadores de los que dispongo". Su papel se ciñe estrictamente a entrenar. Es hombre de club.

 

Lo que significa que no puede esperarse que Benítez tenga demasiada mano ni en entradas, ni en salidas de futbolistas en la plantilla. Su cometido es entrenar a los que tenga, y el capítulo de confección del grupo no le compete o, al menos, él no es la primera persona que decide. Una política de club respetable aunque con interrogantes sobre si es la adecuada o no, pese a que sea casi la misma para sus predecesores en el banquillo.

 

Al aterrizar en la casa blanca, mucho se especuló sobre los "problemas" que un tipo como Benítez, conocido por haberse quejado en otros clubes de los fichajes y las ventas de jugadores, podía causarle al club. Está bastante claro que ha entendido que el Madrid es diferente.