Rafinha le envía un mensaje a Guardiola a través de su hermano Thiago

En el FC Barcelona existía preocupación ante la posibilidad de que Rafinha Alcántara pudiera seguir los pasos de su hermano Thiago aprovechando que a partir del próximo uno de enero puede negociar legalmente su futuro con otros clubs a la espera de quedar en libertad el 30 de junio. Después de la experiencia vivida con Thiago y su fuga precipitada al Bayern, que en la directiva siguen entendiendo como una encerrona de Pep Guardiola y su entorno, Bartomeu ha cogido el toro por los cuernos y ha dado instrucciones a sus colaboradores para que cierren cuanto antes la renovación de Rafinha, sin sustos.

Bartomeu sabe que no puede jugar con fuego en este tema por cuanto Rafinha es uno de los hombres de confianza de Luis Enrique. Su marcha podría suponer la apertura de un nuevo frente en las difíciles relaciones que mantiene el técnico con el staff directivo de la entidad. La continuidad de Rafinha es innegociable. Sí o sí. Y la favorable predisposición del club a mantenerle en su plantilla ha sido trasladada ya a su padre, Mazinho, que pedía cinco años de contrato y se los han garantizado ya. Sólo falta pulir una serie de detalles económicos en forma de pluses por rendimiento que en ningún caso significarán un obstáculo insalvable para alcanzar el final feliz de la negociación.

Las noticias han llegado ya hasta la concentración de la selección brasileña, en donde se encuentra Rafinha, que ha aprovechado la presencia de su hermano en el Bayern Múnich para enviarle un recado dirigido a Guardiola: "Gracias por tu interés, pero me quedo en el Barça".  José Mourinho, que también se había interesado por el jugador, es el otro gran perjudicado. Como ya sucediera con Pedro, el técnico portugués consultó con Luis Enrique la posibilidad de hacerse con Rafinha y, a diferencia de la respuesta que encontró sobre el canario, la negativa ha sido rotunda.