El plan del Valencia para pintarle la cara a Barça y Madrid en pocos años

El plan del Valencia para pintarle la cara a Barça y Madrid en pocos años

A través de su Director de Marketing, se desvelan las líneas maestras del crecimiento en el futuro

Ajeno a lo que sucede sobre el césped, en el terreno puramente futbolístico, el Valencia suma y sigue con su renovación como club. Esta semana, después de un nuevo batacazo en la Liga contra el Athletic de Bilbao, se han conocido las líneas maestras que su nuevo director de Marketing, Peter Draper, que estrenó cargo hace algunos meses, pretende implantar para seguir haciendo que la imagen y la marca del Valencia recupere la posición que merece en el fútbol mundial.

 

Hace algunos días, fue la ampliación de capital de Peter Lim por valor de 100 millones de euros. Y ahora, una promesa comercial: "la camiseta del Valencia vale 10 millones de euros". Se trata del precio mínimo que el Valencia aceptaría por llevar publicidad en su elástica, algo que no sucedió el año pasado y tampoco está pasando en esta temporada debido a que no hay empresas que lleguen a esas cantidades, aún muy alejadas de los 30 millones que cobra, por ejemplo, el Real Madrid.

 

Además, el Valencia ha abierto hace nada su primera oficina en Asia, dentro de un plan estratégico para implementar su presencia en dicha parte del globo. Cómo no, en Singapur, patria del magnate Peter Lim. Pero no todo quedará ahí. Según Draper, es fundamental el fichaje de un jugador asiático que abra mercado y despierte interés. Pero ha de ser "un gran jugador, si no no tiene sentido", explica. "En mi experiencia en el Manchester United, nunca ninguna empresa vino a darnos dinero a nosotros, siempre tuvimos que ir nosotros a las marcas para ofrecer nuestro producto. Solo cuando estuvo Park con nosotros hubo una cola de empresas coreanas que querían invertir en el United porque tenías un jugador asiático de gran nivel pero para eso tiene que ser un jugador con calidad y que no comprometa al equipo", añade, en conversaciones con Plaza Deportiva.

 

¿Kagawa? ¿el propio Park? El baile de nombres comenzará pronto, al tiempo que el ejecutivo también afronta la construcción del nuevo Mestalla y la venta centralizada de los derechos televisivos como otras dos patas de una silla destinada a convertir al Valencia en la alternativa a Barça y Madrid en pocos años.

 

"Luego, puedes quedarte un año sin ir a la Champions. Pero lo importante es crear un equipo competitivo, reconocible, con una gran imagen de marca", finaliza. Un proyecto ambicioso, respaldado por dinero. Pese a que muchos en Valencia estén nerviosos con el futuro.