El Atlético es vulnerable... pero no pierde: 5 cosas que el Celta nos enseñó

El Atlético es vulnerable... pero no pierde: 5 cosas que el Celta nos enseñó

Gallegos y rojiblancos empataron sin goles y dejaron la resolución de su duelo en la Copa del Rey para el partido de vuelta en el Vicente Calderón

Celta y Atlético de Madrid hicieron verdadero el tópico a veces utilizado de que no por ser un 0-0, cada empate sin goles significa una oda al aburrimiento en el fútbol. Los celestes fueron, en general, superiores al cuadro del Cholo Simeone en el global del encuentro, pero no acertaron a marcar un tanto que les hubiese dado mínima ventaja para la vuelta de los cuartos de Copa del Rey. Los colchoneros, por su parte, también pudieron marcar en varias ocasiones, pero de momento su punto fuerte sigue siendo su impenetrable sistema defensivo. He aquí las claves principales del choque:

 

1- Los cambios. La mejor demostración de que el Atlético de Madrid funciona como un reloj de precisión, y de que cuando las cosas están bien hechas en un equipo 'familiar' como el Celta, entre quien entre da la talla. Jesús Gámez, Savic, Augusto Fernández (que volvía a casa) y Jackson (¿se le puede considerar novedad?) entraron en un once que, si bien concedió ocasiones claras ante un equipo ofensivo como el gallego, volvió a cumplir la máxima innegociable del Cholo: Que no le marquen goles. En frente, un Celta también con novedades en defensa y en el centro del campo (Sergi Gómez, Planas, Radoja) pero con las mismas virtudes de siempre: su trío de atacantes, Orellana, Guidetti, Aspas. Cada vez que los tres combinaron fue peligroso para los visitantes. 

 

2- Evidente falta de gol del Atlético. No pocos aficionados colchoneros se indignan cuando se critica este punto, dado que en esta temporada, en la que el equipo tiene, por nombres y probablemente, la mejor delantera de su historia reciente y además de ir líder de la Liga y haber perdido apenas tres partidos desde que arrancó la temporada, criticar cualquier aspecto de los colchoneros se asemeja poco menos que a un sacrilegio. Pero es la verdad evidente. Si Griezmann no marca el equipo madrileño tiene un gravísimo problema de gol, y eso, teniendo la defensa que se tiene, hace que no pierdas pero que tampoco sea seguro que vayas a ganar siempre. En eliminatorias es un problema más fácil de sortear. En la Liga...

 

3- Partido atractivo. A pesar del empate, como decimos, el choque fue intenso y tremendamente disputado. El Celta fue mejor en líneas generales y dispuso de más ocasiones, aunque el Atlético tuvo no pocas opciones de anotar también. Hubo alternativas y probablemente los rojiblancos fueron haciéndose más con la situación del choque conforme avanzaban los minutos y hasta que el árbitro decretó el final del encuentro.

 

4- Jackson, una vez más señalado. El colombiano tuvo mala suerte esta vez. Estuvo a punto de marcar para su equipo en dos ocasiones, pero entonces apareció Rubén Blanco y un defensa 'celtiña'. Lo cierto es que estuvo más activo que en muchos partidos, pero a pesar de ello Simeone le reemplazo a los pocos minutos de comenzar la segunda mitad, en el minuto 59. Otra vez más el primer cambio por un Correa que, esta vez, no aportó esa chispa que siempre le mete a los encuentros.

 

5- Polémica. El Celta, que tuvo una ocasión inmejorable en el minuto 82 de partido al no entenderse Augusto y Moyà y estar el esférico a punto de introducirse en la portería del Atlético (la sacó Gabi bajo palos), reclamó un penalti por manos de Thomas en el minuto 89. Las repeticiones mostraron que, efectivamente, había pena máxima. Finalmente ambos conjuntos nos regalaron una noche entretenida de fútbol, y la promesa de un duelo a cara de perro para la próxima semana en el Calderón.