La 'mentira' que se gesta detrás del "milagro del modesto Leicester City"
El mérito es grande, pero en el plano económico los 'zorros' cuentan con ingresos más poderosos que muchos de los equipos punteros de la Liga
Nadie discute que el mérito del actual líder de la Premier, el Leicester City, es tremendo frente a ‘transatlánticos’ como Arsenal, Chelsea, Manchester United o Manchester City, pero tampoco es que con ‘cuatro cañas’ se ha haya obrado el milagro.
Es cierto que los ‘foxes’ no tienen ‘pedigrí’. Su trayectoria es muy modesta, porque su gran logró fue un subcampeonato que lograron en el año… ¡1929! Pero, atentos, el Leicester destina a salarios 55 millones de euros, una cifra que en la Liga solo estaría al alcance de los grandes y más aún, renovaron a su estrella el delantero goleador Jamie Vardy por más de cinco millones de euros al año, cantidad sólo accesible en España a Barça, Madrid y Atlético.
O sea que de modesto menos. Así detrás de gran temporada se esconde una gran inversión que se basa en que el reparto de los derechos televisivos en la Premier resulta equilibrado y abundante.
Y las comparaciones en este sentido siempre son odiosas. El diario ‘El Mundo’ detallaba que el año pasado, “mientras el Chelsea, campeón, ingresaba 127 millones, el Leicester, decimocuarto, cobró 92, el doble que Atlético o Valencia. Además, el año próximo los clubes de la Premier se repartirán más de 3.000 millones de euros y los de La Liga, pese al decreto y la venta conjunta, apenas llegarán a los 1.000”.
Sí, nadie esperaba está aparición fulgurante del Leicester, pero detrás de estos sorprendentes éxitos deportivos y de indudable mérito se encuentra también una base sólida económica con los ingresos por los derechos de televisión y la fortuna del magnate tailandés Vichai Srivaddhanaprabha.
Otro punto a favor suyo, e insistiendo en no menospreciar el trabajo de un Ranieri que perfeccionó el estilo de contraataque y efectividad, ha radicado en que los grandes favoritos, Arsenal (tercero), Manchester United (quinto), Liverpool (noveno) y Chelsea (decimotercero), atraviesan por un bache que lo hace todo más fácil.