La cena que decidió el futuro de Paco Ayestarán en el Valencia

La cena que decidió el futuro de Paco Ayestarán en el Valencia

El pasado domingo, después del partido del equipo che contra el Getafe, sucedieron muchas cosas.

Que el Valencia empatase a dos goles en el Coliseum Alfonso Pérez de Getafe es un hecho noticioso no tanto por el resultado que se dio sobre el terreno de juego, sino por todo lo que ha generado el viaje de Peter Lim y su plana mayor al palco del estadio getafense. El asiático fue a ver a su equipo después de muchos meses y lo hizo también por ir a Madrid, a la capital, donde después se andaron cerrando muchos asuntos de cara a la próxima temporada.

 

Fichajes, salidas... y el asunto del entrenador. En DB ya hemos analizado los distintos nombres que copan la apretada agenda de García-Pitarch, pero con el tema del técnico es distinto. Si hace un mes parecía existir una guerra abierta entre Manuel Pellegini, Jorge Sampaoli y otros tantos por el puesto, ahora todo ha quedado en el silencio más absoluto. Quizá por ello, una de las últimas 'sondas' que se han filtrado tenga que ver con Paco Ayestarán, que empezó siendo parche y ahora es cada vez más planteado como futuro del proyecto.

 

En el medio Deportevalenciano, muy cercano a la actualidad che, analizan la cena que (se sabe) tuvo lugar en Madrid después del partido contra el Getafe y a la que acudieron Layhoon Chan, mano derecha de Lim en el club, García-Pitarch y el propio Ayestarán. Dicho medio interpreta que si se ha filtrado lo que se habló en esa cena (o lo que supuestamente se habló), que no es otra cosa que la posibilidad de que Ayestarán siga el próximo año, es porque al club le interesa lanzar esa opción para ver cómo se la toma la afición y tener también ese punto de referencia a la hora de decidir.

 

Pues bien. Si esto es así, está claro que una de las alternativas reales es que Ayestarán siga, y definitivamente esto puede deberse a una falta de opciones mejores o a que, simplemente, el técnico se ha ganado la confianza del club. Por tanto, esta cena es el primer paso, positivo para el técnico español, de una posible continuidad. No segura, pero es un avance. Y desde luego puede haber sido la clave que haya decidido el futuro del proyecto valencianista.