El lavado de imagen de Mascherano para continuar en el Barça

El lavado de imagen de Mascherano para continuar en el Barça

El Jefecito no reclama más dinero, como muchos de sus compañeros, porque sabe que no puede ni debe hacerlo.

A sus 32 años y con un central de alto nivel a punto de aterrizar en el Camp Nou, el futuro de Javier Mascherano como jugador del FC Barcelona se presenta más que sombrío. Quiere dejar para el final, cuando esté más cerca de la pizarra y el banquillo que del terreno de juego, la opción que siempre tiene abierta de volver a River Plate para despedirse allí del fútbol como jugador e iniciarse como entrenador.

 

Pero Mascherano quiere agotar sus últimos años entre la elite antes de volver a River. Y le gustaría continuar en el FC Barcelona, a pesar de que Piqué y el nuevo central, posiblemente Marquinhos, le privarán la próxima temporada de su condición de titular que ha disfrutado hasta ahora. Y Luis Enrique no le ve tampoco como alternativa a Busquets, motivo por el que en su momento se le fichó del Liverpool.

 

Mascherano tiene contrato en vigor hasta 2018 y quiere cumplirlo. Tal y como está. Sin reclamaciones. Porque él no es como Busquets y respeta lo que firma. Y también porque se siente identificado con el FC Barcelona y le gustaría acabar su carrera europea en el Camp Nou. La supuesta oferta rechazada del fútbol chino forma parte de este lavado de imagen que Mascherano espera que se traduzca en su continuidad en el club hasta el final de su contrato para volver a Argentina con 34 años.