Alejandro Bedoya: Acaba la Ligue 1 y piensa en el EEUU-Colombia

Alejandro Bedoya: Acaba la Ligue 1 y piensa en el EEUU-Colombia

El volante ofensivo de Nantes no quiere vacaciones

No quiere vacaciones. Alejandro Bedoya, el volante ofensivo del Nantes, no quiere ni planear sus vacaciones ahora que concluye la Ligue 1. Al torneo francés le resta una última fecha para poner el punto final a la temporada 2015-16, con el consabido título para el París St. Germain. Y el estadounidense Bedoya no quiere pensar en sus vacaciones porque desea jugar la Copa América Centenario, donde sueña con estar en el EEUU-Colombia.


El Nantes se dispone a concluir la Ligue 1 con total tranquilidad, aunque con cierto mal sabor de boca porque en algunas fases del
campeonato dio la sensación de que contaba con potencial suficiente como para alcanzar el puesto 5º, que da acceso junto al 4º a jugar la próxima UEFA Europa League. Sin embargo, los ‘canarios’ van a terminar a temporada en la mitad de la tabla, quizá debido a la falta de un ‘killer’ en el plantel, ya que el argentino Emiliano Sala no ha demostrado tener suficiente pólvora en su primera campaña en el Nantes.



Junto al delantero Sala, el otro futbolista que destaca en el grupo es Alejandro Bedoya, un centrocampista estadounidense cuyas raíces están
en Colombia porque de allí sin sus padres, aunque no ha tenido ninguna relación con el fútbol ‘cafetero’. Bedoya llegó a Europa desde EEUU en
enero de 2009, y ha pasado por el fútbol sueco, el escocés y ahora el francés, ya que llegó al Nantes en el año 2013 y tiene contrato en vigor hasta junio de 2019.



Bedoya es un mediapunta que mantiene una gran regularidad en su rendimiento, es un jugador fiable que incluso es efectivo como volante
derecho, por lo que es un profesional muy valorado dentro del fútbol francés. En estos momentos, cuando concluye la Ligue 1, Bedoya no ha
planeado a qué va a dedicar tantas semanas hasta la vuelta al trabajo con el Nantes, y no lo ha hecho porque las vacaciones para él están en
un segundo plano. Lo principal, casi su obsesión, es formar parte de la selección ‘yankee’ que dispute la Copa América Centenario durante el mes próximo.



CAMPEÓN EN 2013


El centrocampista vuelve a ser una pieza habitual en los esquemas de Jürgen Klinsmann, pero la competencia en la selección de las barras y
las estrellas no le permite confiarse hasta ver su nombre en la lista definitiva de 23 elegidos que ofrezca el DT alemán. Bedoya, que con EEUU ganó la Copa de Oro de la Concacaf 2013 a Panamá dando él la asistencia del único gol del partido (1-0 en Chicago), tiene el sueño de jugar el choque contra Colombia, ya que ambas selecciones quedaron encuadradas en el Grupo A junto a Costa Rica y Paraguay.



Para él, y para toda su familia, tiene un significado especial, muy sentimental, ese partido entre ‘yankees’ y ‘cafeteros’, que será el primero del torneo, el viernes 3 de junio en el Levi’s Stadium de Santa Clara (California). Bedoya, de 29 años, cuenta con una familia por completo colombiana, y muy futbolera porque tanto su padre, Adriano, como uno de sus abuelos (Fabio) llegaron a ser futbolistas profesionales en Colombia. Si llega a cumplir su sueño y está presente en ese partido inaugural, la sensación no será nueva para Bedoya. El hecho de defender a la selección de su país natal contra la del país de sus orígenes ya lo ha vivido el centrocampista un par de veces en el pasado, aunque en partidos de carácter amistoso, sin la trascendencia del que llega en pocas semanas.



El jugador del Nantes estuvo en el Mundial 2014 celebrado en Brasil, pero el año 2015 fue menos feliz para él debido a que en mayo, hace
ahora un año, sufrió una lesión de menisco en una rodilla, lo que le mantuvo de baja dos meses. Este contratiempo provocó que no participara en varios partidos de la Copa de Oro de la Concacaf 2015, lo que EEUU notó porque Bedoya tiene calidad, temple para mantener la pelota en su poder, velocidad y mucha capacidad ofensiva. Pese a nacer en New Jersey y pasar su etapa escolar en EEUU, el mediapunta habla perfectamente el español porque lo practica con la familia, tanto la que tiene junto a él como la que vive en Colombia.