Los cinco episodios (silenciados) que han echado a Claudio Bravo del Barcelona

Los cinco episodios (silenciados) que han echado a Claudio Bravo del Barcelona

El chileno vincula su futuro al Manchester City

Decepción. Claudio Bravo abandona Barcelona por la puerta de atrás después de ganarse el vestuario azulgrana como pocos –el campeón de Chile era y es uno de los miembros con mayores aceptación por el grupo- y la afición.

 

Pesos pesados de la plantilla culé aseguran que el que viene –por Cillessen- no mejora al que se va. Una marcha dolorosa que pivota, principalmente, en cinco episodios clave que han terminado por echar a Bravo del Barça.

 

A saber. Primero, la puñalada de Ter Stegen. El alemán amenazó con forzar su macha si no era titular indiscutible. La directiva se doblegó.

 

Segundo, la falta de determinación de Luis Enrique. El asturiano nunca ha escondido sus simpatías por Bravo ante Ter Stegen, pero ante la decisión del club de priorizar al germano por delante de Claudio, calló.

 

Tercero, el proyecto deportivo del Barça. Existe la certeza de que lo mejor del Barça se vio. La propuesta azulgrana pierde fuelle ante equipos que presentan su candidatura a todo tras rehacer el equipo -City, PSG, United- o ya hechos -Madrid, Bayern-. En el caso del City, además, los informes que Claudio posee de compañeros del Barcelona son excelentes.

 

Cuarto, la oferta del Barça era de risa. El chileno negoció con el Barcelona una mejora de contrato el pasado curso. Pese a ser el titular en la portería azulgrana y tener una de las fichas más bajas del equipo, la oferta final del Barcelona fue un primer aviso de que en el club no les importaba lo más mínimo perderlo de vista. Una invitación clara a salir.

 

Y quinto, la familia. La aventura inglesa seduce a los Bravo. Al aumento salarial y protagonismo deportivo se une la predilección de la familia por educar a sus hijos en el habla inglesa. El salto a Inglaterra se valora como una oportunidad.