El plan de fuga de Mascherano del Barça

Sin firma. La prometida renovación del argentino por el Barcelona sigue sin rubricarse después de que el club le prometiera una mejora que aún no tiene sellada. Un detalle menor que esconde otro mayor: el rol del central en el equipo cae en picado. Messi le salvó el cuello cuando la directiva tenía decidido venderlo al mejor postro el pasado verano. ‘Masche’ sigue en el Barcelona pero su rendimiento preocupa del primero al último en el club. Y más aún después de una subida salarial apalabrada que lo convertirá en un suplente de oro en el Camp Nou.

Lo mejor de Javier se vio. La frase se repite en los pasillos del Camp Nou sin cesar. La entidad no quiso tensar la cuerda con Messi, que dio la cara por la continuidad de su amigo, y accedió a retenerlo. Ahora el orgullo de Mascherano amenaza tormenta.

Tras meses mordiéndose la lengua, el argentino tomó el turno de palabra. Mascherano tuvo que meter miedo en los despachos del Barcelona con una oferta de la Juventus para que el club se lo tomara en serio.

La no salida del central al Calcio ha pasado de ser una alegría a un problema. Al club azulgrana le cuadraban las cuentas: salía Javier y llegaba Umtiti y un relevo ‘low cost’ para cubrir las espaldas al francés. Con un crack para el puesto, el lugar de Mascherano era y es la suplencia. Y Javier no quiere quedarse para calentar banquillo.

Con Umtiti ganándose la titularidad partido sí partido también, la salida del argentino el próximo verano se entiende como la solución más honrosa para el futbolista si no quiere terminar sus días como vagón de cola en el Barcelona. Sólo un rol más activo en el equipo frenarán una decisión necesaria desde el pasado verano. El calcio volverá a llamar a las puertas de Javier. Mientras River lo espera con los brazos abiertos.