Rebelión en el vestuario del Barça por el fichaje que ya está cocinando el club

Rebelión en el vestuario del Barça por el fichaje que ya está cocinando el club

La plantilla de Luis Enrique no ve clara la llegada precipitada de un lateral veterano para cubrir la baja a destiempo de Dani Alves.

La intransigencia de Luis Enrique hacia Aleix Vidal, a quien no quiere ver ni en pintura, ha obligado a la secretaría técnica del FC Barcelona a buscar en el mercado a un fichaje bueno, bonito y sobre todo barato. El club ha encontrado a dos laterales baratos, pero lo de buenos y bonitos queda en un mayúsculo interrogante que la plantilla pone en entredicho. 

 

Mundo Deportivo informa hoy que la secretría técnica capitaneada por Robert Fernández y Urbano Ortega está peinando los mercados de Holanda, Bélgica, Suiza y Portugal en busca de ese lateral. Sin embargo, los tiros apuntan hacia otros destinos. Concretamente a Ucrania e Italia. Los objetivos en este momento para reforzar el puesto de lateral derecho del Barça en el mercado de invierno son el croata Dario Srna, del Schakhtar Donets, y el suizo Stephan Lichsteiner, de la Juventus. El primero tiene 34 años y el segundo 32. Precisamente Lichsteiner está en el mercado porque la llegada del ex blaugrana Dani Alves le ha apartado de la titularidad en su equipo. 

 

Ambos nombres han causado pavor en el vestuario del FC Barcelona, que entiende que un equipo que busca la excelencia en su juego no puede ponerse en manos de dos futbolistas que están de vuelta de todo y que poco pueden ya aportar, y mucho menos mejorar, al juego del Barcelona. Los jugadores no entienden que en el club con mayor presupuesto del mundo cometan este tipo de errores de principiante en su planificación deportiva. Era evidente que la marcha de Dani Alves obligaba a fichar a un lateral este verano y en el vestuario nadie entiende que no se hicieran los deberes cuando tocaba y a¡que ahora el club esté dispuesto a fichar, deprisa y corriendo, al primero que se cruce en su camino, aunque se trate de futbolistas de nivel más que discutible y en el tramo final y descendente de su carrera. 

 

La plantilla del FC Barcelona lo tiene claro: refuerzos sí, lastres no. Antes un chaval de la cantera que un veterano sin futuro.