El artículo que destroza a Gerard Piqué (y le saca las miserias) como nunca

El artículo que destroza a Gerard Piqué (y le saca las miserias) como nunca

Zasca brutal al central del Barça

Palo inolvidable. Gerard Piqué está en el punto de mira. El catalán se ha tomado muy  en serio su propósito de ser presidente del club azulgrana, hasta el punto de querer ejercer desde ya. Piqué quiere ser entrenador, mandatario, directivo y jugador de un Barça en el que genera un rechazo enorme. Especialmente en la cúpula.

 Una realidad que está dando paso a todo tipo de críticas, con una que se lleva la palma.

 Salvador Sostres desmonta a Gerard en un artículo en ABC -“Piqué y los años deprimentes”-. Un zasca único con pasajes que dejan al jugador del Barça liquidado. Aquí las mejores perlas.

 

“Quejarse es más fácil que mejorar y Piqué, como su abuelo en los años deprimentes del nuñismo, gesticula hacia el palco o desprecia a los árbitros no porque la indignación le supere y no pueda controlarse, sino porque éste es su entretenimiento de niño mimado, su modo de afirmarse tal como si no fuera deportista hubiera sido el primero de su clase en fumar o en meterse cualquier cosa. No hay peor macarra que el que tiene la vida solucionada, porque se le ve la trampa como el hilo a los supermanes demasiado restaurados”.

 

“Messi o Cristiano, siendo en genialidad y trayectoria muy superiores a Piqué, nunca se han dirigido groseramente al palco ni han usado su poder e influencia para hacer el indio al amparo de su repercusión mediática. Los dos han sido elegidos capitanes de sus equipos por sus compañeros, y Piqué, que nunca ha contado con este reconocimiento, pretende ejercer directamente de presidente desde el terreno de juego, tratando de emular a Sergio Ramos subiendo a rematar de cabeza en los momentos críticos, sin haber resuelto de momento ninguno; o haciendo ver que tira del equipo cuando todo el mundo sabe que de quien depende el Barça es de Messi y algunos días de Iniesta”.

 

“Piqué hace el ridículo en su retórica de niño malcriado que se cree con derecho a tutear a las visitas”.

 

“El Madrid tendría que abrazar a barcelonistas como Piqué porque no hay nada como un bufón quejica –y si es de buena familia, mejor– para enredar a un equipo en tensiones estériles y hacerle perder la concentración en lo que verdaderamente importa”.

 

“En el momento surrealista que vive Cataluña, el Barça no podía ser menos. Es lo mismo la frivolidad de Puigdemont diciendo que el año que viene no será presidente, justo en medio del enrevesado proceso que se supone que lidera, que Piqué jugando a ser Francesc Macià desde el eje de la defensa”.