Villarreal deja varios 'tocados' en el Madrid (y negocios para Florentino Pérez)

Villarreal deja varios 'tocados' en el Madrid (y negocios para Florentino Pérez)

El debate sobre la posible salida de algunos pesos pesados está cada vez más en el aire.

Remontada y polémica. Esas son las dos palabras que más pueden leerse cuando uno estudia los distintos medios deportivos este lunes, hablando de la victoria que el Real Madrid consiguió llevarse del estadio de la Cerámica en Villarreal (2-3), dando la vuelta a un partido que tenía perdido a la hora de encuentro, con dos goles de desventaja y un panorama desolador. El buen fútbol y las ocasiones las puso el equipo local hasta superado el minuto 60 de encuentro, momento en el que llegó la reacción merengue a través de Gareth Bale, Cristiano Ronaldo (de penalti muy discutible) y finalmente Álvaro Morata.

 

 

Para evitar precisamente lo que sucedió durante buena parte del partido y no repetir los mismos errores de Valencia, Zinedine Zidane tiró de su once inicial más catedralicio posible. Recurrió a Pepe para sustituir al lesionado Varane, y después compuso el mismo equipo que logró la Undécima para tumbar a los castellonenses. Volvía la BBC a juntarse después de muchísimos días sobre un terreno de juego. Casi no se recuerda la última vez que habían podido coincidir los 'tres tenores' sobre el césped. Sin embargo, el resultado de esa apuesta fue negativo. El Real pasó de dominador aburrido a equipo sometido por un Villarreal valiente, más potente en el toque de balón en el medio campo e incisivo por las bandas. Los amarillos hicieron sufrir al Madrid cada vez más, hasta que los dos zarpazos de Trigueros y Bakambu pusieron la Liga de color castaño oscuro para los de Chamartín.

 

Benzema

 

De la BBC como conjunto apenas se tuvieron noticias, a pesar de que dos de los tres goles del Madrid fuesen obra de sus miembros. Gareth Bale marcó el gol de la esperanza y fue el mejor hombre de los tres sobre el campo. Karim Benzema volvió a completar un mal partido, perdido en ataque y enormemente poco agresivo en el remate, mientras que Cristiano Ronaldo tuvo lo que tiene siempre: voluntad y ambición... pero sigue evidenciando poco remate. Además, tuvo mala fortuna en un buen disparo al poste y solo pudo anotar de penalti.

 

Fueron dos suplentes habituales, Isco y Morata, los que le cambiaron la cara al equipo. El segundo de ellos marcó el tanto del triunfo y sigue sumando más goles que Benzema a pesar de contar con muchos menos minutos. El debate sobre los dos delanteros centro ha vuelto a instalarse, junto con la sensación de que esta BBC está muy alejada de la que se hizo la mejor delantera del planeta hace dos campañas. Hace semanas que fuentes cercanas al Real Madrid especulan con una posible venta de Benzema tras ocho años vistiendo de blanco, algo que rompería con la línea de ataque más intocable que ha tenido el equipo en muchos años.

 

Y aunque el francés es el peor parado, Cristiano Ronaldo tampoco se salva de la 'quema'. La evolución del portugués para reconvertirse en delantero centro debido a sus limitaciones físicas no termina de cuajar como es debido, y aunque el Madrid no se plantea venderle todavía, parece que afronta su etapa final en su carrera de blanco. Villarreal sirvió para volver a demostrar que los teóricos titulares del Madrid están muy limitados a día de hoy, y que el banquillo suma mucho, tanto o más que la primera unidad. Y especialmente, que la línea de ataque está bajo estudio más que nunca, dada la proximidad del verano y la necesidad por parte de la directiva de hacer algún fichaje de campanillas en año electoral. Podría haber sorpresas.