El crack del Real Madrid que revoluciona la derrota contra el Barcelona con un “me voy”
El vestuario blanco es un polvorín
Caras largas. La plantilla blanca era un funeral tras el mazazo final de Messi en el Clásico. Un partido que terminaba mal, pero empezaba peor.
El cuento de Zidane no lo compra nadie. El vestuario del Real es un clamor contra las últimas decisiones de un ‘Zizou’ que ha tomado el pelo a algunos miembros del equipo que dicen basta.
Zinedine llegaba al Madrid con una máxima: jugarán los mejores. Pero los mejores no juegan.
Contra el Barcelona, Zidane forzaba el concurso de un Gareth Bale renqueante que lastraba el juego blanco en la primera mitad para abandonar el encuentro lesionado antes del entreacto.
La cara de Isco era un poema. También la de Morata/Lucas Vázquez que lideraron las mejores actuaciones blancas de la temporada y se quedan sin pisar el césped.
En el caso de Alarcón, el atrevimiento de ‘Zizou’ es más descarado. Aclamado por el Bernabéu, decisivo en los últimos resultados, Alarcón se quedaba en el banquillo con la renovación por firmar.
El malagueño pide una ficha a la altura de su clase para seguir, pero también una importancia que Zidane le niega. El “me voy” resuena en el Bernabéu. Morata también seguirá el camino.