Daniel Calero: "Se destaparon cosas en la UD Las Palmas que no debían salir del vestuario"

@DanielCMGC

¿Cuán satisfecho estás con la temporada que ha hecho La UD?

En líneas generales, la temporada puede calificarse como buena y meritoria, si bien se pueden distinguir dos partes muy diferentes. Una parte que llega hasta el 17 de marzo -fecha en la que se vence al Villarreal en el Estadio Gran Canaria- y otra que comienza justo al día siguiente con la lectura del comunicado por parte de Quique Setién, siendo cierto que en ambas etapas la asignatura pendiente fue ganar fuera de casa. El objetivo era la salvación y ésta se consiguió con mucha antelación, por lo tanto no podemos calificarla como mala teniendo en cuenta la segunda vuelta.

¿Crees que el equipo podía aspirar a más, sobre todo tras el arranque de año?

Obviamente eso es lo que deseábamos todos los aficionados a la UD, si tenemos en cuenta que se viajó a Granada con la posibilidad de dejar Europa a sólo un punto en aquella jornada. Pero la realidad es que, al final, hay mucha diferencia entre los seis primeros clasificados y la UD. Teniendo los pies en el suelo hay que asumir que, salvo la "meritoria temporada milagrosa" del Alavés, es muy difícil que un recién ascendido o un equipo que está en su segunda temporada en Primera División, ocupe plaza europea al término de la misma.

¿Hubo algún fichaje o algún nombre que consideres especialmente culpable del ligero descenso en el rendimiento del equipo en la etapa final de campaña?

Personalizar el fracaso en algún jugador, el entrenador o la comisión directiva creo que sería un error por mi parte. Pero sí creo que todos tienen una cuota en el logro de la permanencia y del mismo modo, también en el final de temporada que trajo más disgustos que alegrías. Está claro que el déficit de puntos fuera de la isla, la relación convulsa entre el entrenador y la directiva desde que comenzaron los contactos por la renovación y la rueda de prensa en la que se destaparon cosas que no debían salir del vestuario fueron alicientes más que suficientes para que las cosas se fuesen torciendo poco a poco.

¿De dónde viene tu pasión por la UD?

Viene, como a muchos aficionados, por herencia. Desde muy pequeño, los días en los que Las Palmas jugaba en casa, la ciudad respiraba de manera muy distinta al resto de los días. Los primeros recuerdos que tengo de la UD son en el Estadio Insular, yendo a la Grada Curva con mi padre. De hecho, dada la amistad que tenía mi padre con Félix Marrero -jugador de Las Palmas en la década de los 70 y 80- uno de los primeros regalos de cumpleaños que recuerdo fue una foto en el Estadio en un partido que perdió Las Palmas 1-2 contra el Espanyol. Por otra parte, creo que el hecho de vivir en una isla y la calidez en la forma de ser del canario en general y del grancanario en particular, hace que cada triunfo de la Unión Deportiva Las Palmas se celebre siempre, guste el fútbol o no. Las Palmas es un emblema de la isla, independientemente del gusto que cada ciudadano grancanario pueda tener por el fútbol. Como ejemplo, el ascenso a Primera División en 2015. Casi medio millón de personas salió a celebrarlo desde el momento en que Ocón Arraiz pitó el final del partido.

¿Es el choque ante el CD Tenerife el 'derbi' más bonito del mundo?

No sé si es el más bonito del mundo, porque si bien es cierto que tiene cosas muy bonitas, también tiene otras muy feas. Me gusta mucho el momento en el que saltan los equipos al campo, en el que las aficiones muestran mosaicos y tifos que preparan con todo el gusto del que son capaces durante esa semana, como también me gusta ver a los jugadores haciendo en determinados momentos un sacrificio extra por el rival que tienen enfrente. Pero sí es cierto que uno ve con envidia sana 'derbis' como el del País Vasco, en el que se entremezclan las aficiones con absoluta normalidad y cordialidad. Si llegásemos a conseguir eso, sería perfecto. Pero creo que aún hay mucho que mejorar desde diversos sectores -aficiones, medios de comunicación, etc.- para poder ver algo así.

¿Cuál es tu deseo para la 17/18 de la UD?

Me conformo con acabar la temporada en el puesto 17º de la tabla. Después de 13 años navegando por el desierto y soñando con la Primera División, una cuarta temporada consecutiva ya sería un gran logro. Pero, puestos a soñar, sueño con ver a mi equipo clasificándose para Europa en la siguiente temporada o, mejor, ganando la Copa del Rey y entrando en Europa por la puerta grande. Si el Alavés ha estado a punto de hacerlo esta temporada, lo que ha quedado claro es que se puede hacer. Ahora sólo hay que poner el empeño suficiente y saber dirigir el trabajo y los esfuerzos para que eso ocurra. Es difícil, claro. Pero todos soñamos con que nos toque la lotería, no que nos toque el reintegro solamente.