El abono de Ancelotti en el Bernabéu puede provocar un plebiscito continuo
La estabilidad dependerá más que nunca de los resultados
Carlo Ancelotti ya no es entrenador del Real Madrid, pero de momento tiene la firme intención de no serlo de ningún otro equipo hasta dentro de una temporada. El italiano, que en breve viajará a Estados Unidos a sufrir una operación rutinaria, tiene la idea de vivir en Madrid y tomarse un año sabático. Pese a que este lunes estuvo cenando con su agente, Ernesto Bronzetti, y Adriano Galliani, insistió en que todavía no regresará al Milan.
La siguiente información que ha salido a la palestra tiene que ver con Carletto y el Madrid, pero en otro plano: El técnico seguirá acudiendo al Bernabéu en calidad de aficionado, porque tras dos temporadas se ha enamorado del todo del club y quiere disfrutar del equipo y de la ciudad. Tendrá un abono en el coliseo blanco. Sin duda un detalle que puede resultar más que determinante en los próximos meses.
Rafa Benítez, el elegido con casi toda seguridad por la cúpula directiva y Florentino Pérez para dirigir al equipo el próximo curso, llega con la enorme tarea de ganarse a una plantilla que quería que siguiese el italiano y a una afición que no le tiene una alta estima. No gusta su estilo de juego. Esto hará que, a la mínima ocasión en la que las cosas no vayan bien sobre el césped, no ya sólo el técnico español sino el presidente tengan todas las papeletas para llevarse una buena bronca por parte del respetable. Y si se sabe que Ancelotti, el que casi nadie quería fuera de la entidad, está presente, habrá lío.
Que nadie descarte cánticos favorables al transalpino a partir de septiembre. Eso sí, siempre que las cosas vayan mal, que no tienen por qué ir de esta forma. No obstante, el morbo está servido.