El vestuario azulgrana cree que el Barça le viene grande a esta directiva
Varios jugadores están descontentos con las acciones de la junta y se echa de menos una mejor planificación de la próxima temporada
Los resultados del Barça son difícilmente mejorables. El equipo, tras ganar la Liga con una defensa casi impenetrable y una delantera demoledora, se prepara para sumar a sus vitrinas la Copa de Rey y la Champions. En las dos próximas semanas, los jugadores tienen en sus manos hacer historia. No obstante, en el vestuario no acaban de estar demasiado satisfechos con la gestión que esta realizando la actual junta directiva. Algunos creen incluso que el Barça le está viniendo demasiado grande.
La destitución de Andoni Zubizarreta como director deportivo por parte del presidente, Josep Maria Bartomeu, fue toda una sorpresa para el grupo. Muy especialemente, por lo precipitada y poco justificada que pareció esa decisión. Desde entonces, la planficación de la temporada que viene a nivel deportivo está como mínimo empantanada. Por momentos, parece que las cosas se están haciendo demasiado a salto de mata, sin que pueda distinguirse una línea de actuación clara. En este sentido, el mal momento que está atravesando en general la cantera barcelonista, con el Barça B prácticamente abocado al descenso de categoría, también genera muchas suspicacias. No se acaba de comprender cómo es posible que un equipo que acabó tercero el año pasado sea actualmente el colista de la categoría de plata.
A todo ello, además, se suma la situación personal de algunos jugadores. Xavi se marcha del club no tan contento como desearía. Las negociaciones con la directiva han sido mucho más complicadas de lo que habría cabido esperar, teniendo en cuenta que se trata de todo un símbolo de la entidad barcelonista. Pedro tampoco está demasiado contento. Le están poniendo trabas para dejar el club, a pesar de que su peso en el equipo ha caído en picado. Con la Eurocopa del año que viene en el horizonte, necesita unos minutos que sabe que aquí no tendrá. Una situación muy parecida a la de Martín Montoya. El descontento de Luis Enrique con la actual junta también es muy patente. Por mucho que desde las altas esfereas se asegure que va a seguir, continúa sin soltar prenda al respecto. Y Rafinha, finalmente, sigue esperando una llamada para renegociar su contrato, que termina el 30 de junio del año que viene.