El primer incendio serio en el Valencia de Marcelino: una cuestión de "pelotas"
Primer conflicto serio en el seno del vestuario, que el técnico asturiano tendrá que mitigar.
Marcelino García Toral es conocido por ser un entrenador de mano firme con sus plantillas. Y hasta ahora, las cosas le habían ido relativamente tranquilas en el Valencia. Pero después del derbi contra el Levante, el técnico asturiano ha tenido que enfrentarse a la primera situación desagradable en el vestuario che: un enfado por parte de Simone Zaza que ha saltado a la prensa y ha sido aireado por la pareja del delantero italiano.
Todo comenzó con la decisión de Marcelino de dejar a Zaza fuera del once inicial frente a los granotas. La reacción por parte del futbolista fue no hacer los rondos de calentamiento antes del partido, mostrar todo tipo de muecas y gestos de desaprobación durante el mismo (salió en la segunda mitad) y marcharse directamente al túnel de vestuarios sin saludar al público. El propio técnico tuvo que ir corriendo a buscarle para que volviera a saltar al césped a presentar sus respetos a la grada.
Zaza ha sido siempre conocido por ser un jugador de sangre caliente. Este tipo de enfados son frecuentes con él. Pero ha ido a dar con un técnico que no se amedrenta ante estas situaciones. Claro está, que Marcelino no contaba con Chiara Biasi. La modelo y pareja del italiano, siempre activa y muchas veces polémica a través de redes sociales, compartía hace horas un enigmático mensaje que, en la prensa valenciana, han entendido iba dirigido al entrenador che.
“Si quieres gente de carácter, debes saber gestionarla y aceptar también que no logres gestionarla. Pero sobre todo recordar que las pelotas que uno tiene, las tiene siempre. No lo dejes en el cajón sin motivos. Arréglalo. (O quédate con quien lleve incorporado un libro de instrucciones)”, ha sido la frase que Biasi ha dejado publicada en Instagram. Ahora bien: parece que Zaza se ha arrepentido de este arrebato de mal carácter, y en el entrenamiento posterior al choque se le pudo ver callado y esforzándose ante la atenta mirada de Marcelino. Veremos dónde llega todo esto…
