La llamada de Van Gaal a De Gea que deja al Real Madrid sin portero
David no moverá un dedo para salir de Manchester si Iker Casillas no abandona el club
De Gea no da la cara por el Madrid. El portero del Manchester Unietd lleva un doble juego que marea en los despachos del Real donde le exigen que de un golpe sobre la mesa para forzar su marcha. No ha sido así. El internacional español ha comunicado a Van Gaal que estará en el inicio del curso con el United más ilusionado que nunca. Así lo afirman desde Inglaterra donde explican que el técnico llamó a David para hacer tabla rasa. El Real le había pedido que fuerce su posición no presentándose al inicio del curso. No será así.
El ex del Atlético entiende que su salida al Madrid tuvo un momento y que ahora toca centrarse en el club de Old Trafford. De Gea no cierra la puerta a nada, el mercado es muy largo, pero tampoco va a poner su posición en 'jaque' cuando el Madrid no ha cumplido con la primera exigencia para aterrizar en el Bernabéu: quitar a Casillas del medio.
Y es que De Gea continúa pidiendo a Florentino que le limpie el camino. El portero sigue demandando la salida de Casillas como condición sí o sí para aterrizar en el Bernabéu. El aún portero del United no está dispuesto a luchar por la portería con Iker, ni a quedar mal en Manchester. Sólo fichará por el Madrid si el capitán sale. Hasta entonces no moverá un solo dedo.
El internacional español no está dispuesto a pedir su traspaso al Real Madrid a través de la figura del ‘transfer request’, que recoge la reglamentación inglesa. Una declaración escrita de un futbolista por la que le comunica su deseo de ser traspasado. De esta manera De Gea podría desbloquear las negociaciones y acelerar su fichaje por el Real Madrid. Una opción que David no contempla.
Además, la relación con Van Gaal es tensa. De Gea rechazó una oferta de 200.000 libras a la semana (unos 282.000 euros) que lo convertiría en el portero mejor pagado del mundo, para seguir con los 'red devils', y quiere acercar posturas con el holandés. El curso es largo: puede firmar la continuidad con el United o salir libre de la Premier el próximo año pero, hoy por hoy, juega para el club de Manchester y no quiere perder más galones que pongan su puesto en peligro. Perimero, Iker. Después, él.