
Alexa Dellanos no tiene vergüenza ¡Ni Anastasiya Kvitko! ¡Va a estallar!
La estadounidense no se cohíbe ni en público
Hay modelos que sacan lo mejor de sí mismas cuando están frente a una cámara, las hay que necesitan un ambiente agradable para poder conseguir sus mejores perfiles y luego hay unas cuantas que les da igual, que lucen en cualquier lado, de la manera que sea y, si es necesario, con el público que haga falta, como Anastasiya Kvitko. Y a este último grupo pertenece también Alexa Dellanos, que se ha sacado fotos de todos los colores y formas, y en todas deja entrever algo más. Como en esta.
Algo habrá cogido de sus genes. Un poco de ambos, a decir verdad. Su padre es doctor y se llama Alejandro Loynaz, de ahí tiene la salubridad que se le ve a primera vista; de su madre, que es a quien más se parece, ha cogido la soltura para desenvolverse frente a las cámaras. Porque Myrka Bárbara Dellanos, que es su nombre completo, es periodista de profesión, y se graduó en la Universidad de Miami.
Y esa ciudad ha quedado ligada a Alexa, la ha acompañado y moldeado hasta ser una influencer de reconocido prestigio (hoy alcanza casi los 2 millones de suscriptores). Pero no solo eso ha adquirido de su madre, sino también el gusto por el lujo y las personalidades más importantes del mundo, ya que Mykra ha estado unida en cierta forma a George Bush, que la nombró para el grupo de donaciones caritativas, o sobre todo Luis Miguel, con quien la periodista tuvo una relación. Alexa conoció al cantante ya que sus padres biológicos se divorciaron en 1998.
Y todo este conglomerado de acontecimientos ha hecho de Alexa una persona con las ideas muy claras: le gusta estar en boca de todos, tener el mejor cuerpo, viajar y vivir entre el lujo. Y con solo 23 años, Alexa es el sueño americano hecho realidad. No solo ha conseguido todo eso, sino que va camino de perpetuarlo. Y es por cosas como esta: en un supermercado tira de su dentadura perfecta para tratar de hacer estallar ese envoltorio de chicle. Lo de sus pantalones también va por el mismo camino… Asimismo a la foto le va como anillo al dedo los roles que se ha asignado ella a sí misma.