¡Guau! Becky G se pone una blusa azul y nos lo enseña todo. ¿Huele bien?
La cantante en lo más alto de su carrera
La vida es eso que ocurre mientras nosotros hacemos otros planes. Alguien dijo una vez algo así y tenía toda la razón del mundo. Por mucho que intentemos cambiar las cosas cuando la vida nos quiere llevar hacia un lugar. El destino en ocasiones, aunque parezca increíble, es más fuerte que cualquier otro movimiento.
Y muchas veces nos empeñamos en luchar contra este terrible final que es la vida. Y algunos lo consiguen y ganan, rompen su camino y cogen otro que acaba siendo mucho mejor. Pero no es lo habitual. Ni mucho menos. Sin embargo, estos son los casos en los que nos tenemos que fijar. ¿Por qué no ser nosotros de esos? ¿Por qué no cambiar nuestro destino y acabar siendo lo que realmente queremos ser? Becky G es un espejo donde mirarnos.
La americana de origen mexicano estaba destinada a ser una hija de inmigrantes más en Estados Unidos. Con suerte llegar a la universidad y poder aspirar a un buen trabajo. Ese era su destino y ese debía ser su final feliz. Pero ella lo ha cambiado todo.
Desde pequeña quiso ser la nueva Shakira. Ser cantante y reventar los escenarios de todo el mundo. Se había empeñado desde que era pequeña que su vida no podía ser aquella para lo que estaba marcada. Y por ello comenzó a cantar desde que era una niña. Se apuntó al coro del colegio, hizo grupos… y le llegó el estrellato tras trabajarlo mucho. Rompió su destino.
Ahora la hemos visto presentar uno de los cosméticos más conocidos del mundo, Colour Pop Cosmetics. La marca con más de 9 millones de seguidores en Instagram se ha fijado en Becky para que les promocione. Todos salen ganando. Becky se ve más guapa y con más dinero en la cartera y la marca vende más al usarla como imagen. Con una camiseta azul y enseñando busto, Becky puede vender cualquier cosa.