Con las piernas abiertas y presumiendo de eso: ¡Eva Padlock desatada!

Ha cogido velocidad en esto de mostrar al mundo sus gracias y por lo visto, no tiene ninguna intención de parar. Eva Padlock ha venido para llevarse por delante a toda la que se interponga en su camino, quiere ser la única.

Se ha inventado mil formas de enseñarnos que la naturaleza fue de lo más generosa con su delantera, la han comparado con las más grandes en curvas como Demi Rose y se convirtió durante un tiempo en chica Moster GP gracias a sus dos razones, pero ni con esas anda contenta Eva.

Quiere más, ahora que ha probado el éxito y la fama, lo que tiene, le sabe a poco.

Por eso se le ha ocurrido echar mano al resto de su cuerpo, que la conozcamos no sólo por el volumen de sus curvas vistas de frente, sino que sepamos también cómo es por detrás, que se la pueda reconocer de frente y de perfil con la misma facilidad.

Dicho y hecho, Eva se ha puesto manos a la obra.

Y empieza sentada, con las piernas abiertas, que sabe que eso vende. Pero ni lo hace de cualquier forma, ni llevando cualquier cosa, que con la modelo todo está medido al dedillo.

Eva se enfunda en un mono ceñido mientras mira de reojo al objetivo, como si quisiera jugar a que mantuviéramos la mirada a sabiendas de que va a ser imposible que no dirijamos la vista a su retaguardia, ¡Eva eres única ideando escenas y escenarios!

Y si ya sabíamos de sobra que Eva presumía de su tamaño cuando se la veía de frente, ahora nos queda claro que también presume de su tamaño por detrás, que se gusta y que quiere que lo sepamos.

Como para no gustarse con ese físico y como para no presumir de él, ¿verdad?