¡Rita Ora lo enseña! Ni JLo: ¡Pampita tiene rival!

Que se preparen el resto de las curvas porque llega ella

Las hay que empiezan siendo una cosa en esto de la fama y al cabo de los meses terminan en otra, o en las dos. Que aunque fama llama a fama, no todas valen para lo mismo ni todos los cuerpos son perchas apropiadas para alternar con la profesión. Y es que si hubiera que irse al comienzo de los comienzos de Rita Ora, habría que hablar de su música, de su arte a la hora de componer y de su talento como actriz, que no es decir poco. Pero como además de estas bondades la cantante derrocha personalidad por los cuatro costados además de curvas, ahora también es modelo e imagen de una de las casas con más solera en esto del estilo y la moda, Escada, para ser exactos.

Y se ve que por eso de ser también modelo de penalti, por eso de tener el poder para elegir el tono de la colección de Escada, el rojo que tanto le va y por eso de presentar los premios GQ en una especie de conjunto de ropa interior con bata de gasa tiene la sartén por el mango para elegir vestuario y estilismo como el que luce en la publicación.

Que si los estilistas se equivocan con su figura, para eso está ella, para modificar. Que si lo suyo es la voz y también las curvas, que se noten. Y nada mejor que un vestido de tirantes, prieto a más no poder, de los que dejan el balcón de su delantera a la vista del que quiera mirar y aprietan la retaguardia sin compasión para que no quede ninguna duda. De los que llevan estampado de fuego porque ya se encargará ella de incendiar con su presencia. De los de Rita la modelo, de los que le sientan como ella sabe, sin necesidad de estilista alguno.