Lanús derrotó 1-0 a Racing y alcanzó la cima de la Superliga
El Granate exhibió un destacado rendimiento en el segundo tiempo, sometió a la Academia y se impuso por el gol en contra de Eugenio Mena. Con el triunfo, igualó a Boca y Argentinos en lo más alto.
En el estadio Néstor Díaz Pérez, en el marco de la fecha 16 de la Superliga, Lanús, con un destacado rendimiento en el segundo tiempo, derrotó 1-0 a Racing e igualó en la cima de la tabla de posiciones a Boca y Argentinos Juniors, que aún deben cumplir con sus compromisos de la jornada.
El elenco dirigido por Luis Zubeldía exhibió las premisas de su estrategia desde los primeros compases del partido. Uno de los pilares de su cimiento defensivo consistió en ejercer una presión progresiva, en la que comenzaba replegado en su campo y, cuando detectaba que Alejandro Donatti, Lucas Orban y Mauricio Martínez no hallaban opciones de descarga, José Sand y Lautaro Acosta se lanzaban sobre ellos para forzarlos a dividir la pelota.
Una vez que recuperaba la tenencia, el Granate no vacilaba y, de inmediato, desplegaba transiciones veloces desde la velocidad de Marcelino Moreno, Acosta y Carlos Auzqui, quienes buscaron profundizar para sacar provecho de un hipotético retroceso defectuoso del contrario.
En contrapartida, la Academia intentó adueñarse del protagonismo del encuentro a partir del control mayoritario de la posesión. Sin embargo, presentó serios inconvenientes en la etapa inicial para imponerse en el mediocampo ya que desarrollaba una circulación del balón pasiva y anunciada, la cual facilitaba la labor de sus rivales.
Como consecuencia, no consiguió localizar con frecuencia a los intérpretes indispensables en la construcción del juego: Matías Zaracho, quien fue absorbido ante los marcajes de Lucas Vera y Facundo Quignón, David Barbona y Matías Rojas.
Por lo tanto, con sus volantes inactivos y contando con injerencia en el desarrollo del enfrentamiento esporádicamente, el visitante se vio obligado a lateralizar de manera reiterada y sus ataques se volvieron predecibles y carecieron de un factor amenazante.
Con el transcurso del duelo, las imprecisiones adoptaron un rol protagonista y los equipos lograban que sus respectivas posturas prevalecieran durante efímeros períodos. En este panorama, la entidad de Avellaneda fue el primero en coquetear con la apertura del resultado.
A los 35 minutos, Nicolás Reniero realizó una destacada maniobra individual por el sector derecho y envió un centro raso hacia el corazón del área que no pudo ser conectado de lleno por Zaracho y cayó en los pies de Rojas, quien remató de zurda desde el perímetro del área y obligó la reacción de Agustín Rossi, quien desactivó el peligro con facilidad.
En el complemento, el dueño de casa inició con una actitud dominante, que propició que se instalara en el campo oponente. Pese a que abusaba de los centros para resolver los ataques, y Sand no podía imponerse frente a Donatti y Orban, recuperaba la pelota con rapidez e impedía las réplicas de Racing, que naufragaba en un océano de temores e indecisión.
La franja derecha se erigió como la zona predilecta del conjunto del sur del Gran Buenos Aires para inquietar. Desde esa banda, a los 26’, Moreno se centralizó y filtró un pase entre los zagueros centrales que encontró a Acosta, quien trazó una diagonal perfecta, pero impactó con debilidad y el disparo se marchó desviado.
A medida que Moreno aumentaba su cuota de intervención en la edificación del juego, Lanús gozaba de mayor claridad y panorama en los metros finales y reducía la distancia hacia la ansiada inauguración del marcador, la cual se produjo a los 32’.
Moreno, uno de los futbolistas más destacados de la segunda parte, recibió en la izquierda y lanzó un preciso cambio de frente, a la espalda de Rojas, con destino a Di Plácido, quien controló con prolijidad y ensayó un potente tiro que, tras un desvió en Eugenio Mena, superó la oposición de Gabriel Arias y decretó el 1-0.
Racing no mostró atisbos de reacción y ni siquiera halló rutas alternativas para aproximarse a la valla de Rossi. De esta manera, arriba a la final del Trofeo de Campeones, donde se enfrentará con Tigre el sábado 14 de diciembre, tras una deslucida imagen y una derrota que lo privó de ascender a la cima del torneo. Lanús, por su parte, obtuvo un valioso triunfo que lo estableció en lo más alto del certamen, al menos transitoriamente, y volvió a apropiarse de los tres puntos luego de cuatro presentaciones sin ganar (tres caídas y un empate).
Formaciones:
Lanús: Agustín Rossi; Leonel Di Plácido, Ezequiel Muñoz, Lautaro Valenti, Alexandro Bernabei; Marcelino Moreno (ST 46’ Matías Esquivel), Facundo Quignón, Lucas Vera (ST 43’ Tomás Belmonte); Carlos Auzqui (ST 29’ Pedro De La Vega), José Sand y Lautaro Acosta. Entrenador: Luis Zubeldía.
Racing: Gabriel Arias; Iván Pillud, Alejandro Donatti, Lucas Orban, Eugenio Mena; Mauricio Martínez; David Barbona (ST 18’ Lucas Andrada), Matías Zaracho (ST Walter Montoya), Matías Rojas; Nicolás Reniero (ST 28’ Jonatan Cristaldo) y Darío Cvitanich. Entrenador: Eduardo Coudet.
Gol: ST 32’ Eugenio Mena -en contra- (LAN).
Amonestados: PT 25’ Darío Cvitanich (RAC), 28’ Matías Zaracho (RAC) y 46’ Ezequiel Muñoz (LAN). ST 12’ José Sand (LAN) y 35’ Jonatan Cristaldo (RAC).
Árbitro: Darío Herrera.
Estadio: Néstor Díaz Pérez (Lanús).