Volkswagen está en serios problemas: se desploman sus beneficios y hablan de despidos y cierres de fábricas
El Grupo Volkswagen atribuye sus malos resultados a una economía difícil, los elevados costes y el rechazo del público a los vehículos eléctricos
La industria del automóvil europea no está pasando por su mejor momento, pero algunos lo llevan mejor que otros. No es el caso del Grupo Volkswagen, que se enfrenta a uno de los momentos más críticos de su historia. El gigante alemán está en una situación financiera crítica. La marca ha hablado estas últimas semanas de recortes de personal y de una profunda reestructuración que podría incluir el cierre de al menos tres de sus 10 fábricas alemanas.
De ser así, estaríamos hablando del primer cierre de plantas de la compañía en sus 87 años de historia. Por el momento, Volkswagen se está esforzando por evitarlo y han optado por rebajar un poco el tono. De hecho, esta misma semana han anunciado una propuesta que se basa en una reducción del salario a los empleados del 10% y una revisión de los bonus. Esta medida podría afectar a 140.000 empleados en Alemania.
Tremendo batacazo en las cuentas de Volkswagen
Es fácil entender la necesidad de reestructuración del Grupo Volkswagen viendo sus últimos resultados. La compañía ha revelado estos días sus resultados del tercer trimestre y lo cierto es que no hay forma de endulzarlos. Hablamos de una caída en las ventas del 8,3% en comparación con el mismo período de 2023; así como de un desplome del 41,7% en los beneficios. La facturación ha sido de apenas 2.860 millones de euros en el tercer trimestre, frente a los 4.890 millones de euros facturados el pasado año.
Por su parte, el beneficio neto ha sido de 8.917 millones de euros de enero a septiembre, cifra un 30,7% inferior a la del mismo periodo de 2023. Asmismo, en los nueve primeros meses del año, las ventas del Grupo han caído un 4,4%, hasta las 6.762.000 unidades. Esto ha contribuido a que el resultado operativo haya bajado un 20,5%, hasta los 12.910 millones de euros (con un margen del 5,4%), pese a que los ingresos por ventas han aumentado ligeramente.
¿A qué se deben los malos resultados del Grupo?
Volkswagen atribuye los malos resultados de este trimestre a varias cuestiones. Destacan especialmente el aumento de los costes fijos y los gastos de reestructuración. El fabricante también hace referencia a la escasez en la cadena de suministro, un entorno macroeconómico complicado y una “renovación integral” de su cartera de productos deportivos de lujo.
Por último, debemos hablar de un estancamiento en las ventas de vehículos eléctricos. Y no solo de los EV del grupo alemán, sino de toda la industria. Una oferta de productos que no les queda más remedio que ofrecer y en la que han invertido auténticas millonadas, pero que no a todo el mundo le encajan en sus planes.