El verdugo del Barça será el sustituto de Haaland en el Dortmund
El delantero no está jugando en el Liverpool y será traspasado este verano
Si uno marca dos goles al Barça en la semifinal de Champions en el partido de vuelta cuando tienes que remontar un 3-0, algo que sucedió en la temporada 18/19, y, además, también anota en la final y su equipo gana la orejona, se supone que no debería tener problemas para ser titular en su club o, al menos, tener cierta regularidad en el juego. Pues no, para el delantero belga Divock Origi no ha sido suficiente, por lo menos su entrenador, Jürgen Klopp, no cuenta con él y esta temporada solo ha jugado el 7% de los minutos de su equipo. Una participación muy pobre, pese a los méritos del delantero.
Recordemos que Origi, en la semifinal contra el Barça anotó tanto el primer gol como el último, apeando al equipo de Messi de una final que acariciaba con la punta de los dedos. Su participación en la Champions hizo que su valor se disparara y llegó a estar tasado, según Transfermarkt, en 30 millones de euros, pero, tras dos temporadas en las que el técnico alemán le tiene relegado en el banquillo, su valoración se ha visto reducida prácticamente a la mitad, 16 kilos. En la campaña actual, ha jugado en 17 partidos, pero solo en uno como titular, saliendo desde el banquillo en las segundas partes en el resto, ha anotado un gol y ha repartido dos asistencias, un bagaje muy pobre para los 536 minutos disputados.
Además, al hecho de que Klopp no le de oportunidades se suma que Diogo Jota se ha colocado delante de él en las opciones a la delantera. Por eso, el jugador quiere una salida, tiene 25 años y cree que está perdiendo unos años muy importantes para su carrera futbolística. Ahí es donde entra el Borussia Dortmund, equipo que empieza a asumir que su gran estrella, Erling Haaland, saldrá del club, por más o menos dinero, este verano, y, por eso, ha decidido hacerse con los servicios de Origi, que pasaría así a tener minutos en la Bundesliga. Además, el Liverpool no va a poner ningún problema e, incluso, puede aceptar una oferta de 12 millones de euros, un precio bajo para un goleador.