Lamine Yamal empieza a preocupar en el vestuario del Barça
El Barça está intentando controlar el entorno mediático del extremo catalán

El FC Barcelona consiguió cerrar la renovación de Lamine Yamal hasta el 30 de junio de 2031, convirtiéndose así en una de las mejores noticias del verano para la entidad azulgrana, teniendo en cuenta que su ampliación de contrato era una cuestión de estado dentro del club. Aun así, y a pesar de que se ha asegurado su continuidad deportiva, el jugador preocupa en el vestuario y en la institución.
Más que nada, por su juventud, ya que solo tiene 17 años, aún no ha cumplido la mayoría de edad, y en el Barça existe cierta preocupación respecto a su entorno y a las amistades que pueda tener que le afecten en el devenir de su carrera. Hay miedo de que no se tuerza, como ya ha pasado con otros futbolistas que apuntaban mucho y que se han ido a pique por cuestiones extradeportivas.
Lamine Yamal preocupa por la vida que pueda tener fuera del Barça
Por eso, el club está controlando al futbolista en algunos sentidos y está intentando evitar situaciones polémicas o tóxicas. Además, también está recibiendo el apoyo del vestuario, con consejos de los más veteranos y también de sus compañeros más íntimos, que al igual que él, son jóvenes, como Pedri o Gavi, pero que ya tienen más experiencia en la élite del fútbol respecto a Lamine.
Toda la entidad culé se ha cerrado en banda para evitar que el extremo catalán se eche a perder, ya que el jugador ya se ha consolidado, aún sin tener los 18 años, como uno de los mejores del mundo, por lo que su progresión puede llegar a niveles estratosféricos si sigue de la misma manera. De hecho, está en las quinielas para ganar el Balón de Oro, algo impensable hace un tiempo.
El club está tranquilo por su madurez
Por lo tanto, en el Barça existe preocupación por él, pero también seguridad de que es un chico con la cabeza amueblada y ya muy maduro, a pesar de su edad, por lo que solo un entorno tóxico y amistades interesadas podrían hacerle desviar del camino. De momento, todo va bien, pero el club lo seguirá controlando.