El Real Madrid ya lo echa de menos: nuevo rival para Cristiano Ronaldo por el trono de Arabia Saudí

Esta es la semana de debuts de leyendas. Si hace unos días hablábamos de Leo Messi y su primer partido con la elástica del Inter de Miami, ahora ha sido el turno de Karim Benzema y su nuevo equipo, el Al Ittihad, con el que ha dado comienzo su andadura en el Campeonato de Clubes Árabes, una competición, donde tendrá como rival directo a un Cristiano Ronaldo al que no le hará ninguna gracia ver peligrar su trono como rey del fútbol saudí, algo que con el estado forma actual de Benzema parece ser una amenaza real.

Dos destellos de crack para cambiar el partido

El choque no comenzó nada bien para Karim Benzema, el galo vio como sus rivales se le adelantaban en el marcador y ponían en riesgo un debut, que lejos de ser el soñado, podía ser toda una tragedia. Sin embargo, el ex del Real Madrid se negó a que le arruinaran su gran noche y dio paso a su magia con una asistencia marca de la casa, un centro bien tocado y con la curva justa para que su compañero rematara a placer para poner el empate en el marcador y para destensar un choque que pedía a gritos una gran acción de Karim, que recordó a aquellos tiempos donde nutría de balones a Cristiano Ronaldo.

Posteriormente, en la segunda parte, Benzema volvió a cargarse el equipo a sus espaldas y, de la mano de un recién ingresado N'Golo Kanté dio pie a una jugada marca de la casa, recibió escorado en la izquierda y desde la frontal golpeó el balón con una rosca que hizo que la estirada del meta rival fuera en vano, poniendo así el definitivo 1-2 en el marcador y certificando un gran debut del ex del Real Madrid.

Cristiano Ronaldo no estará solo

Si bien todo apuntaba a que CR7 iba a ser el rey absoluto del fútbol de Arabia Saudí, la llegada del último Balón de Oro, ha puesto en riesgo una distinción que el astro portugués no querrá dejar ir con facilidad. Y es que, con Messi también brillando en el otro lado del Atlántico, a Cristiano Ronaldo no le queda otra opción que ser, de forma insdiscutible, el mejor jugador de la competición árabe, algo que deberá certificar a base de goles, victorias y grandes actuaciones en las competiciones que dispute con el Al Nassr.