El ataque de celos de Fernando Alonso con Honda que lo deja en ridículo
El piloto español acapara el protagonismo en los test de Montmeló
No se hablaba de otra cosa. El enésimo lío de Fernando Alonso con el McLaren -se le salía una tuerca de la rueda en la sexta vuelta de los test de Montmeló- convertía a Alonso en el hazmerreír, una vez más, de la F1.
Bromas que eran especialmente ácidas en el box de Toro Rosso, la nueva escudería de Honda.
En Japón están desando el fracaso de Alonso más que las victorias de su propia escudería. Honda sabe al dedillo el juego sucio de un Fernando que no paró hasta echarlos. Y ahora se lo están pasando en grande. ¿Por qué?
Más allá de los problemas iniciales -nada nuevo- la primera tanda de test confirmó en tiempos lo que es un secreto a voces y viene avanzando Don Balón: el McLaren no está para luchar por los podios, no por victorias y menos aún por el Mundial que afirmaba Fernando hace unos días.
Un cachondeo con Alonso, que apunta a año en blanco, que irrita al español que lleva peor que mal que, además, a Toro Rosso, con motor Honda, las cosas le estén yendo casi mejor que al McLaren al firmar más de 90 vueltas por las poco más de 40 que pudo dar el monoplaza de Fernando.

“Son entrenos. hay cientos de periodistas y cada cosa se cuenta como si fuera fútbol y ese es el gran error, que esto es la F1. Si da 96 vueltas aquí y no acaba en Australia, es lo que cuenta. Si uno pierde la tuerca aquí y otro tiene el coche desmontado porque tiene un problema de diseño y tiene el garaje cerrado y nadie lo ve todo el mundo cuenta lo de la tuerca porque nadie lo ve. No es radiar cada minuto cada cosa que pasa. en la NBA van a entrenar y nadie sabe si alguien falló un mate, sólo se comenta el partido”, responde Alonso nervioso al ser preguntado por la cuestión. El ataque de celos es de época.