Fernando Alonso saca las miserias de la F1 con un recadito fulminante

Fernando Alonso no se muerde la lengua. El asturiano, metido en un pozo en la F1, ha agarrado el micrófono para subir a la WEC (Mundial de Resistencia) a los altares y dejar a la vista las miserias de la competición reina que necesita un buen meneo para enganchar al aficionado harto de monopolios.

"Me sentí bien al volver a estar en lo más alto de un podio. Hacía mucho que no lo pisaba y fue una buena preparación para el WEC", arranca Alonso.

"Hemos hecho muchos test, mucho simulador, mucha preparación. Estuvo bien conseguir ese resultado", añade.

"En el WEC son carreras bastante largas, son impredecibles. Puede que tengas bastante confianza en las primeras horas, pero todo puede cambiar de repente. Estuvo bien comenzar con un buen resultado, acabar la carrera, ganar experiencia y prepararnos para Le Mans", atiza.

"Tengo más problemas cuando paso de la Fórmula 1 al WEC porque los estilos de conducción son muy diferentes. Cuando vuelvo, no necesito adaptación alguna. Estoy cómodo con todo porque es con lo que he aprendido", explica.

"Mi estilo de pilotaje se ha desarrollado para la F1. No espero ningún problema. Creo que estoy más cerca de mi límite en un F1. Tienes que llevarlo todo al límite, ser perfecto en cada vuelta y repetir esa perfección en todas las vueltas. En el WEC has de ser súper flexible. No repetirás la misma vuelta las seis horas", advierte.

"Esa flexibilidad es bastante buena para mí, porque tengo que adaptarme muy rápido. Esa es una de las cosas que hacen especial el WEC, que tienes que adaptarte en cada vuelta y que es impredecible hasta la bandera a cuadros. Eso es genial para el deporte, el pilotaje y los aficionados", avisa a la F1.