Hamilton estalla contra la FIA y su adiós puede estar más cerca

Hamilton estalla contra la FIA y su adiós puede estar más cerca

El Gran Premio de Turquía pone en riesgo la integridad de los pilotos

Lo que parecía que iba a ser la fiesta de Mercedes y la celebración de Lewis Hamilton de su séptimo título Mundial puede acabar en tragedia. Las condiciones de la pista del Gran Premio de Turquía, recién asfaltada, hacen imposible la conducción para los pilotos que para más dificultades han visto como ayer y hoy por la noche llovía y hacía de pista del circuito de Estambul una pista de hielo donde es imposible hacer una vuelta sin una amenaza de trombo. Hamilton estalló ayer contra la FIA por permitir que un circuito en esas condiciones forme parte del Mundial de Fórmula 1. Muchos ven esto como la razón final a la que se acogerá el británico para colgar el volante y dejar la competición la temporada que viene. Como decíamos, una fiesta que puede acabar en tragedia.

Aunque el que será, si no es mañana dentro de dos semanas, siete veces campeón del Mundo en la Fórmula 1 lleva un año donde se está quejando por todo, pero es cierto que esta vez las quejas de Hamilton son secundadas por la mayoría de los pilotos de la parrilla. Desde Carlos Sainz a Leclerc, muchos han sido los que se han quejado de las condiciones y han hablado del peligro que va a suponer para los pilotos competir en una pista con tantos problemas para la conducción.

Hamilton sabe que está ante un día histórico ya que puede igualar al gran Michael Schumacher como piloto con más Mundiales en la Fórmula 1, pero no quiere que esto empañe la realidad y el trato de la FIA a los pilotos durante la temporada. El culmen al desastre es el Gran Premio de este fin de semana en un circuito que no parece que no cumple con las medidas de seguridad necesarias para disputar una carrera de Fórmula 1. Si mañana llueve, hoy lo está haciendo en los entrenamientos libres, podemos tener una de las carreras más accidentadas de los últimos años. Más entretenimiento para el espectador pero mucha más inseguridad para los pilotos. Veremos como acaba todo, pero Lewis Hamilton puede haber dicho basta. Si se va, la Fórmula 1 perdería a su mayor estrella en los últimos 15 años. Casi nada.