Mercedes amedrenta a Ferrari y da esperanzas a Carlos Sainz: Leclerc y Hamilton, en el ajo

Continuamos dándole bombo a que el futuro de Lewis Hamilton cada vez despierta más dudas ya que, por el momento, Mercedes no ha logrado poner sobre la mesa unas condiciones del todo convincentes para extender el compromiso del siete veces campeón del mundo.

Esto ya está dando pie a que Toto Wolff esté vigilando de cerca a los pilotos que, tras haber demostrado muy buenas aptitudes en el asfalto durante las últimas temporadas, se han ganado el derecho a poder tomar el testigo el inglés en Mercedes, siendo estos Lando Norris, Charles Leclerc y Pierre Gasly, aunque esta última opción cada vez se presenta más utópica por su reciente vinculación con Alpine.

Cabe señalar que la llegada de Fred Vasseur a Ferrari y la cantidad de medidas adoptadas por la marca para mejorar el rendimiento de su monoplaza sitúa a fecha de hoy, 2 de febrero, a Leclerc como un firme candidato a ganar el título en 2023, pero eso no quita que el propio piloto monegasco haya originado -de forma indirecta- el gran motivo de preocupación para sus dirigentes con ese interés progresivo de Mercedes en contratar sus servicios.

Hay efectos positivos

La parte que más brilla en esta persistente amenaza de futuro de Mercedes es, sin duda, para Carlos Sainz. El piloto español de 28 años se vinculó a Ferrari hace dos temporadas, pero en todo momento ha vivido a la sombra de un Leclerc que ha estado considerado tanto por Mattia Binotto como por Vasseur como la gran referencia del equipo.

Es cierto que su relación siempre ha sido muy buena tanto dentro como fuera de la pista y esa especial predilección por el monegasco no ha impedido a ambos pilotos mantener una entrañable amistad, pero en el plano deportivo Sainz podría estar acercándose al momento ideal en su carrera: estar a los mandos de un monoplaza competitivo con suficiente potencial para aspirar al título y ser la gran esperanza para ello en la escudería de Maranello.