La durísima crítica a Marc Márquez que deja a Rossi, Álex Rins y Dovizioso con la boca abierta

La durísima crítica a Marc Márquez que deja a Rossi, Álex Rins y Dovizioso con la boca abierta

Duras palabras hacia el de Cervera

El primero en reír y el primero, también, en atizar.

Marc Márquez no ha necesitado que nadie le tirara de las orejas después de regalar la victoria a Álex Rins en el GP de las Américas tras caer cuando lideraba la carrera en solitario y a más de tres segundos de su perseguidor.

La ‘cantada’ es de principiante y ha tenido una respuesta fulminante del propio Marc con una crítica durísima hacia su persona que ha dejado a sus rivales, los Rossi, Rins, Dovizioso y compañía, con la boca abierta.

“He frenado tres metros más tarde. A 300 km/h tres metros no es nada. Después iba 2 km/h más lento, pero con dos grados más de inclinación y un poco menos de presión de freno. Iba un pelín más despacio, con un poco más de inclinación y menos freno. Ves la ecuación y no es tanto, pero cuando vas al límite se te va cuando menos te lo esperas”, arrancaba Marc.

“Da rabia la situación, pero somos humanos y estas cosas pasan y hay que saber admitir el error, saber por qué ha pasado, que aún no lo he entendido, pero intentaré entender. Recapacitar sobre ello para ir más fuertes en Jerez pero sí que es cierto que en este circuito me he encontrado bastante bien en todas partes y en el warm up hemos hecho otro pasito adelante. He salido súper convencido en la carrera, con buen ritmo y cuando he abierto un poco de distancia he bajado un poco el ritmo y después era constante. Más o menos como fue en Argentina, sin pasar ese punto de riesgo, pero cuando hay frenadas tan largas se ven durante la carrera muchos errores, que se van largos, pero estaba siendo muy constante y sí que da rabia, más que por los puntos, es por un circuito en el que me encuentro cómodo y en el que he tirado 25 puntos, hablando claro”, insistía el campeón de Honda.

“Me encontraba cómodo, no como otras veces que iba pasado de rosca, como en Australia hace tres o cuatro años, o en otros circuitos. Me tranquiliza porque con el error estamos sólo 9 puntos por detrás en el campeonato y, sobre todo, porque tenemos un entorno y una dinámica muy buena para luchar por el campeonato”, apunta Márquez que también ha tenido palabras para Álex Rins: “En Argentina iba por Valentino y aquí pujé por Rins, pues así hay campeonato. Más que nada porque así se queda todo mucho más igualado; Rins es uno de los candidatos, lo dije ya en Qatar y será uno de los rivales así que lo importante es que nos hemos caído liderando una carrera y no estando quintos sin saber qué hacer. Me quedo con lo positivo siempre, tratando de aprender de los errores y en Jerez seguramente será mejor”.

“No vivo ni del pasado ni del futuro. En Argentina se hablaba de que ganaría todas las carreras y sería campeón a mitad de la temporada y hoy que he hecho el mayor error… bla bla bla… El deporte es así y se tiene que aprender, pero por eso tengo el grupo que tengo, la gente alrededor que tengo para aprender de los errores y saber analizar pero haciendo mala sangre no se consigue nada”, reitera el piloto español.

“He puesto en las redes sociales que somos humanos y que cometemos errores. Hay que aprender de ellos e intentarlos mejorar. Hemos cometido un error, que ha sido grande, pero el deporte es así. Un futbolista falla un penalti cuando menos te lo esperas y aquí te puedes caer, porque vamos al límite. Es ahí donde toca gestionarlo de la mejor manera. En Argentina hice una carrera perfecta y me gané los elogios y hoy me he caído”, se sincera Marc. 

“Nunca viene bien una caída así, y menos donde los 25 puntos parecían tan cerca, tal como estaba la carrera, pero hasta que no se cruza la línea de meta no se puede relajar uno. Y eso no quiere decir que me haya relajado, porque seguía igual de constante para no relajarme”. Imposible arrancar la moto. “Era una zona con un poquito de subida y los banderas tampoco han ayudado mucho, casi que me desequilibraban más que empujaban recto. Tampoco lo he intentado con toda mi fuerza, porque la estribera estaba rota. Quedaba un dedo de estribera y difícilmente hubiera podido acabar la carrera”, concluye.

La dureza, serenidad y lectura fría de Márquez en la derrota asusta más a sus rivales que la victoria: el español ha aprendido la lección. Y puede ser el punto de inflexión que finiquite el Mundial. Marc tiene, ahora, avisan, más hambre que nunca.