El Oporto 'disfruta' de la otra cara de Casillas, que no añora Madrid

La 'operación Iker Casillas' resultó tan dolorosa para el madridismo (al menos, una parte más que importante del mismo) como una inyección de alegría fantástica para el equipo destino del ex guardameta del Real Madrid, el Porto de su nuevo entrenador y amigo, Julen Lopetegui. En el club de los Dragones necesitaban algo así después de ver cómo buena parte de la columna vertebral del equipo que tan buenas sensaciones causó en toda Europa la pasada temporada era desmantelado por los grandes del viejo Continente, en una práctica que ya es habitual cada vez que un conjunto de los denominados de 'segunda fila' sobresale algo más de lo normal. Alex Sandro, Casemiro, Jackson Martínez... las estrellas se fueron marchando y en su lugar llegó Iker, atizado y apaleado desde la capital y con la vitola de ser prácticamente un ex futbolista. Nada más lejos de la realidad. En Portugal ha recuperado la tranquilidad primero, después la sonrisa... y por ende la confianza.

Lejos queda aquella imagen de Casillas despidiéndose del Madrid, solo y abandonado ante más becarios que periodistas, en una calurosa y plomiza tarde de verano, en la sala de prensa del Bernabéu. "Esto hay que arreglarlo", se dijo Florentino Pérez ante semejante esperpento, organizando un acto algo más aseado para el día siguiente. No fue, en cualquier caso, un adiós acorde a quien se marchaba. Ahora, Casillas trata de poner un punto y seguido a su carrera y olvidarse de sus dos últimos cursos en su nuevo equipo. Y como él desliza y se le ve en la cara no añora la capital, más allá de la nostalgia lógica de quien se va de donde ha vivido toda su vida. Le gusta su nuevo reto. Disfruta otra vez del deporte. Deporte, sólo eso.

Por lo demás, los arreglos entre el Real Madrid y el Oporto con respecto a su ficha hicieron que no bajaran sus prestaciones económicas en el país vecino. Eso sí, lo que nadie puede discutir es que Casillas ha causado un terremoto mediático y de fans en su nueva ciudad e incluso en la Liga donde ahora se desempeña. Es una fuente de ingresos enorme para el club portugués, amén de ser el ídolo de su equipo en cuanto a ventas de merchandising. Según el diario 'El Confidencial', que se hace eco de este tipo de detalles en lo que es la nueva vida de Iker Casillas, la venta de camisetas del capitán de la Roja se agotó casi desde su fichaje, día en el que el Oporto superó en 'Me Gusta' de Facebook a su rival histórico, el Benfica. Cadenas como TVE o Bein Sports se han hecho con derechos de partidos y de la Liga portuguesa respectivamente por su tirón mediático. En definitiva, un cambio para bien, seguramente para todos, que no tiene visos de ser breve.