La Roja es un polvorín: desvelan las enganchadas en la última concentración

Follón en la 'Roja'. A los malos resultados en el campo se suma la tensión del vestuario. En la última concentración del combinado español han tenido lugar encontronazos entre jugadores y capitanes ante la pasividad de un seleccionador que parece estar de vuelta de todo. En el grupo hay jugadores que ya señalan abiertamente a Del Bosque como el máximo responsable de lo que le ocurre a España: la falta de autocrítica y el hecho de que algunos jugadores como Iker Casillas o Andrés Iniesta sean los 'mimados' de Vicente y jueguen por decreto ley, molesta a la nueva hornada de futbolistas.

Los palos apuntan al portero del Real Madrid y a sus continuas enganchadas con De Gea: los más críticos creen que Iker está haciendo pagar al portero del United las opciones de este de 'quitarle' el puesto en el Madrid. La relación entre ambos es nula: no hablan más que lo mínimo. Una situación que está lastrando al grupo ante la connivencia de Del Bosque.

Otros jugadores con un largo recorrido en la 'Roja' también están en el punto de mira. Las opiniones de que Andrés Iniesta aún vive de su gol en la final del Mundial van a más. El de Albacete no está en su mejor momento pero parece tener el puesto en el once garantizado sí o sí.

Cesc Fàbregas también está en el punto de mira. A algunos de sus compañeros no les ha gustado la actitud del de Arenys estos días y ha habido enganchada con el ex del Barça como protagonista y Ramos repartiendo leña. Del Bosque también habría cambiado su actitud hacia el jugador del Chelsea. El seleccionador no olvida la penúltima convocatoria en la que Cesc se retiró de la concentración del 11 de noviembre por unas 'supuestas' molestias que no se creyó nadie.

Además, los cambios de Vicente - Vitolo, San José, Juanmi, Raúl García, Rodrigo, Callejón, Nolito- no terminan de cuadrar a los más veteranos que creen que lo nuevo no mejora a lo presente.

Las salidas de Xabi Alonso, Xavi, Puyol o Villa hacen que la selección española carezca de líderes. Sergio Ramos tira del carro -Casillas ha perdido ascendencia en el grupo-, pero está muy solo.