La "comidita" de Cristiano empieza ahora... y se llama Liga y Champions
El plan oculto para la recuperación del portugués ha dado sus frutos. El luso espera tapar muchas bocas a partir de estos últimos meses de competición.
Cristiano Ronaldo compareció este martes junto a Zinedine Zidane en la rueda de prensa previa al partido entre la Roma y el Real Madrid. Es obligación que un futbolista atienda a los medios antes de cada partido de Champions League, y que lo haga junto al entrenador. Lo que no lo es tanto es que ese futbolista sea Cristiano. El luso no se prodiga demasiado ante las cámaras y los micrófonos españoles, y por eso cada vez que lo hace o deja titulares, o le aprietan tanto que le acaban haciendo darlos. Es lo que sucedió con un par de reflexiones, ambas sobre el Barça: La ya célebre sobre el penalti de Messi ("sé por qué lo hizo") y una acerca de la buena sintonía de la MSN, a la que restó importancia.
"No tenemos que darnos besitos y abrazitos para demostrar nada. Yo no tengo que ir a cenar con Benzema o que Bale venga a mi casa. Lo realmente necesario es sintonizar en el campo porque somos profesionales". Las comiditas y los besitos y los abrazos no valen de nada. En el Manchester gané la Champions y no hablaba con Ferdinand, Giggs o Scholes. Nos dábamos los buenos días y ya está. En el campo defendíamos el interés del equipo", comentó.

Está claro que en el tono de voz de Cristiano había un punto desafiante. Un desafío que lleva meses esperando y que parece que ahora empezará a jugarse: ser el de antes. Él, mejor que nadie, sabe que su rendimiento en 2015 ha estado bastante por debajo de lo esperable por todos, y que los problemas físicos y personales que ha atravesado han provocado, probablemente, la mayor crisis deportiva de toda su carrera. Pero Zidane le ha sometido a un plan específico de recuperación para intentar que regrese a su mejor versión. No sólo colocándole otra vez en la banda izquierda, sino también controlando sus entrenamientos y sus dietas. Un plan adaptado a su físico y a su edad, según cuenta OkDiario.
Ante el Athletic, Cristiano completó uno de los mejores partidos del curso, sólo siete días después de firmar un desastroso choque en Granada. Alterna todavía buenas y malas actuaciones, sobre todo fuera de casa. Por tanto, el Olímpico, escenario de Champions, competición en la que ya batió el récord de goles en una fase de grupos en diciembre, parece el escenario perfecto para que CR7 inicie la reconquista de su mejor cara. Ese es su objetivo, de cara a tener la Champions y la Liga como "comidita" en forma de títulos al final de la temporada.