El triunfo de Pastore tiene una clave: La regularidad de sus genialidades
El argentino está realizando una gran temporada en Francia
Javier Pastore lo ha pasado mal en Francia. El argentino y su entorno, ahora saboreando el éxito, recuerdan que estuvieran a punto de arrojar la toalla al verse en medio de un proyecto que no cuajaba, que es lo que era el París Saint-Germain 2011-12, que no ganó título alguno pese a estar ideado para el éxito desde el minuto uno.
Aquel mal resultado del conjunto parisino fue consecuencia de la lógica. Un equipo no se forma de un día para otro; todos los inicios son difíciles, y Pastore estuvo en el nacimiento de este gran PSG actual, al ser el primero de los fichajes estrella del jeque Nasser Al-Khelaifi, que abonó 42 millones de euros al Palermo para cerrar el traspaso. Después del argentino llegaron los demás, desde Ibrahimovic a Cavani pasando por Lucas Moura, Lavezzi, Thiago Silva, David Luiz...
Este Pastore de 2015 es posiblemente la mejor versión suya que han visto los aficionados parisinos en la Ligue 1, los europeos en la UEFA Champions League, y los argentinos con la selección albiceleste. El volante derecho, por su innata calidad individual, siempre ha sido capaz de hacer en cada partido algunos toques magistrales y unas pocas jugadas espectaculares, pero a esas pinceladas aisladas está uniendo en la actualidad una cualidad muy importante: su rendimiento esta teniendo, por fin, regularidad.
El argentino es un artista, como muchos otros en este deporte, capaz de lo mejor en algunos momentos, y de la estela de esa genialidad vivía durante muchos minutos más, sin tener presencia en el juego. Ahora, Pastore quiere lucirse en una jugada y en la siguiente, y en la siguiente, porque ha tomado conciencia de que tiene que ser más decisivo para el funcionamiento de su equipo.
De momento, lo está consiguiendo porque de él se habla ahora bastante en Europa. Otro matiz importante en su carrera es el psicológico. Pastore es un hombre de mentalidad frágil, y para ofrecer un buen rendimiento tiene que sentirse muy querido por su DT y sus compañeros. Y esta circunstancia se está dando en estos momentos con Laurent Blanc, Gerardo ‘Tata’ Martino y el resto de futbolistas del PSG y la selección Argentina. El volante ha comenzado a sentirse importante, a comprobar que es titular indiscutible, y eso está aumentando su confianza en sí mismo.
Si de algo no se puede acusar al argentino en este 2015 es de desaparecer durante los partidos, de pasearse sobre el césped como si poco le importara el resultado y el esfuezo de sus compañeros. Esa mala sensación que a veces transmitía Pastore no pasó desapercibida para Alejandro Sabella, que no le convocó para el Mundial de Brasil. Sin embargo, tal es el crecimiento profesional del ‘Flaco’ que incluso se han levantado rumores sobre su futuro.
Las habilidades del volante las conoce bien Carlo Ancelotti, DT con el que coincidió al pasar el italiano una etapa en el PSG. De ahí que se apunte al Real Madrid como uno de los posbiles destinos de Pastore, algo que él rechaza comentando que “todavía tengo una temporada más de contrato con el PSG, así que estoy tranquilo”. Su contrato concluye el 30 de junio de 2016, aunque club galo ya le ha ofrecido que firme una ampliación hasta 2019 con mejoras.
Especialista en dar asistencias a los delanteros, él mismo puede actuar cerca de ellos como mediapunta, una posición que le facilita pisar el área rival más a menudo, algo que satisface a Pastore por su carácter ofensivo.
José Benjamín