500 botellas de champán, terapia de choque para Rusia tras su horrible Eurocopa

500 botellas de champán, terapia de choque para Rusia tras su horrible Eurocopa

Desmadre a la rusa de dos jugadores internacionales de ese país en un carísimo local de Montecarlo

Las penas con champán son menos. O al menos es lo que piensan los futbolistas rusos Aleksandr Kokorin y Pavel Mamaev que gastaron 250.000 euros en 500 botellas de esta espumosa bebida en un local de Mónaco, después de que Rusia terminase la Eurocopa 2016 sin pasar de la fase de grupos, tras perder 3-0 ante Gales.

 

Los dos jugadores integrantes de la selección rusa han provocado un escándalo en su país, después de que fuesen publicadas las imágenes de Mamaev y Kokorin en un club nocturno de Montecarlo.

 

Las redes llenas de vídeos y fotos de los ‘deportista’ fumando shisha al ritmo del himno de Rusia y bebiendo champán Armand de Brignac, que cuesta unos 500 euros por botella. Este local, el 'Twiga' cuenta con uno de los restaurantes más populares de Montecarlo, justo al lado de la Riviera francesa, y una mesa allí cuesta alrededor de 1.000 euros.

 

Y la indignación ha llegado al ministro de Deportes de Rusia, Vitali Mutkó, que ha manifestado que "la participación de Alexandr Kokorin y Pável Mamáev en esta fiesta ruidosa será tomada en consideración durante la formación del nuevo equipo nacional". Rusia está pendiente de nombrar a un nuevo seleccionador.

 

No ha sido el único en poner el grito en el cielo. El diputado del partido gobernante, Rusia Unida, Mijaíl Starshínov, expresó que "este es un comportamiento bestial. Serían castigados solo por sonar el himno de Rusia durante la fiesta con champán y shisha, incluso si estuvieran en una compañía normal".