La 'maldición italiana' baja de las nubes al Real Madrid de sopetón

Al Real Madrid de Ancelotti se le atraganta lo italiano. El conjunto blanco ha disputado esta campaña cinco partidos -cuatro amistosos- ante equipos transalpinos, saldados con cinco bofetones a mano abierta. El último, bien reciente: 2-1 frente a una Juventus. Un bofetón a mano abierta que baja al Madrid de las nubes de golpe y frena a los atrevidos que ya veían al Real en Berlín/Cibeles. 

Además, la historia reciente del conjunto blanco en tierras italianas no es nada amable con el Madrid: desde septiembre de 1987 no apea a un rival italiano en rondas a doble partido. Desde aquel lejano emparejamiento con el Nápoles de Maradona (2-0 en el Bernabéu y 1-1 en San Paolo), el Milan en dos ocasiones, la Juve en tres y el Torino y la Roma en una dejaron en la cuneta a los blancos en varias eliminatorias europeas. En ninguna de los siete duelos directos lograron los blancos tumbar a sus rivales italianos. Han pasado casi 28 años. Y la cosa pinta igual.

Ante la Juventus, en la ida de las semifinales de la Champions, lo dicho: más de lo mismo. Toca remontar en un Bernabéu con una premisa clara: así no se gana la Undécima. La imagen del Real no hacer honor a la de un club que quiere hacer historia levantando la segunda orejona consecutiva. Con Bale desaparecido, Isco perdido, Casillas metiendo el susto en el cuerpo al madridismo, Varane fallón, Ramos desubicado y Morata agachando la cabeza a más de uno, a Ancelotti se le gira mucho trabajo para la vuelta ante una Juventus que sacó los colores a los blancos y que puede ser un verdadero cerrojo en Madrid.

Un Carletto que volvía a verse las caras con la que fue su afición entre 1999 y 2001, años de los que los hinchas ‘bianconeri’ no guardan un muy buen recuerdo: apodaron a Carlo como ‘el cerdo’. Ni el propio ‘Carletto’: “La ‘Juve’ es un club que nunca amaré”, dejó escrito en su autobiografía. Se entiende.