La exhibición de Messi le acerca al Balón de Oro y condena el sueño de CR7

El despliegue de juego que mostró el crack argentino ante el Bayern, con dos tantos al alcance sólo de los grandes elegidos, complica las aspiraciones del portugués de igualar sus trofeos

La exhibición de Messi le acerca al Balón de Oro y condena el sueño de CR7

Lo dijo Pep Guardiola en las horas previas al partido y lo repitió Gerard Piqué al término del mismo: si Leo Messi está en estado de gracia, no hay quien lo pare. Dos latigazos en apenas tres minutos dejaron al campeón alemán herido de muerte y Neymar, en el tiempo añadido, le dio la puntilla definitiva. Cómo no, tras asistencia del propio argentino, quien supo aprovechar perfectamente la manera en que Luis Suárez peleó por llevarse el esférico. Ya en la primera mitad dejó una acción espectacular, driblando a varios contrarios, que levantó una sonada ola de admiración en la siempre exigente grada del Camp Nou.

 

Su nueva exhibición de juego le acerca más al quinto Balón de Oro y aleja el sueño de Cristiano Ronaldo de darle alcance. El portugués, tras dos triunfos seguidos, acumula tres galardones, uno menos que Messi. Hasta principios de año acariciaba con mimo la idea de empatar con el crack barcelonista el año que viene. No en vano, había firmado un arranque de temporada del todo espectacular y nada parecía indicar que su ritmo fuera a decaer. No obstante, tal vez el discurso en el que aseguró que iba a alcanzar al argentino al proclamarse vencedor del Balón de Oro 2014 acabó siendo una maldición.

 

El crack madridista experimentó un evidente bajón en su juego y Messi aprovechó la circunstancia para recortar las distancias que los separaban a ambos en la pelea por el Pichichi y la Bota de Oro hasta límites insospechados. Actualmente, el portugués acumula 42 tantos, dos más que el argentino, pero su ventaja llegó a ser de hasta 12 goles. Además, el azulgrana tiene en su mano repetir el trébol que ya se llevó con el Barcelona en la temporada 2008-2009, la primera de Pep Guardiola al frente del banquillo barcelonista. Su equipo es líder en la Liga, está clasificado para la final de la Copa del Rey y tiene también casi un pie y medio en la finalísima de la Champions. Y a pesar de todo, de su buen momento, de todos los piropos, no se le suben los humos. Asegura que hay que seguir trabajando. Y esa, desde luego, es la clave para que los éxitos no se queden en la cuneta.