El 'Top Secret' de Álvaro Morata y el Real Madrid que anima el Liechtenstein - España

16 goles en dos partidos. Eso es lo que España ha sido capaz de endosarle a Liechtenstein en esta fase de clasificación para el Mundial de Rusia 2018, al que la Roja se acercó un poco más tras barrer al último equipo del grupo por 0-8 en Vaduz, en un partido que sirvió para que los de Julen Lopetegui se divirtiesen sin agobios. Fueron ocho y pudieron ser muchísimos más, en un encuentro que no tuvo ningún tipo de complicación ni de historia.

Marcaron Sergio Ramos en el minuto 2 de partido, Morata (2), Isco, Silva, Iago Aspas (2) y Göpel en propia meta tras intento de Gerard Deulofeu. Lopetegui ensayó el que ya empieza a ser su dibujo para este tipo de choques menores en fases de clasificación, un 3-6-1 con menos defensa y dos carrileros bien abiertos en banda, y con un centro del campo y una delantera bien poblados de futbolistas con calidad, toque y rapidez para sorprender a defensas cerradas. Es un entrenador valiente Lopetegui, que en un año ha conseguido revitalizar el juego de España, darle un pequeño aire de cambio con galones a tipos como Isco, Thiago, Koke (que no jugó hoy) o Asensio, y volver a generar ilusión a menos de doce meses del Mundial.

El encuentro estuvo marcado por las rotaciones. Pedro, Monreal, Thiago y Morata entraron de inicio, repitiendo, entre otros, Isco y Sergio Ramos. El choque volvió a demostrar que la columna vertebral de esta selección empieza a tornarse blanco, pues hay mimbres del Real Madrid no sólo en el once inicial, sino también en el banquillo, donde los Nacho, Lucas, Asensio y Carvajal esperaron su oportunidad (salió el central). Isco realizó un nuevo recital tras lo del pasado sábado y Ramos abrió la lata a los pocos segundos de comenzar el choque. Pero también vimos marcar por partida doble a Morata, un hombre que hasta hace bien poco también representaba al Madrid en estos compromisos.

¡FINAL! ¡Contundente victoria de la @SeFutbol! ¡Seguimos líderes! #VamosEspaña 💪🏻🇪🇸 pic.twitter.com/fAgsCLW5Ld

— Selección Española (@SeFutbol) 5 de septiembre de 2017

Morata, precisamente, fue uno de los grandes protagonistas del choque. Marcó dos tantos, hizo otro legal que le anularon y tuvo innumerables ocasiones para engordar una cifra de tantos que habría sido histórica. Con él de referencia arriba, España gana movilidad, asociación y más pegada que con falso 9. Y su exhibición vuelve a avivar un debate que en el vestuario de la Roja y en el del Madrid es de actualidad: mejor que no se hubiese ido del Real. Los blancos, con Karim Benzema y Bale en la cuerda floja, le echarán de menos.

Bien lo saben los pesos pesados, pese a que no puedan decirlo en público y apoyen a Benzema en el día a día en el Real Madrid. Pero Morata va poco a poco consolidándose tanto en el Chelsea como con la Selección, y de seguir así, puede ser un permanente objeto de debate que escueza, y mucho, a Florentino Pérez.