Capello recibirá la indemnización más alta de la historia por dejar Rusia

En su segunda experiencia como seleccionador, el técnico Fabio Capello ha acabado de patitas en la calle, pero, eso sí, con una indemnización que le ayudará a digerir el fracaso.

Capello llevó a la selección inglesa al Mundial de Sudáfrica de 2010, aunque los ‘pross’ cayeron en octavos ante Alemania. La Federación optó por mantenerle, pero antes de la Eurocopa de Ucrania y Polonia de 2012 a la que clasificó decidió dimitir por la decisión de la Federación de retirar a Terry de la capitanía por unas declaraciones racistas.

El técnico italiano recibió poco después, en julio de 2012, la oferta de Rusia y aceptó. El ex del Milan metió a su nuevo combinado en el Mundial de Brasil, aunque la participación decepcionó al no poder pasar de la primera fase, al sumar únicamente dos puntos en un grupo con Bélgica, Argelia y Corea del Sur.

Pese al resultado renovó hasta 2018 con las miras puestas en la Eurocopa de Francia 2016. Sin embargo, Rusia marcha tercera del grupo por detrás de Austria y Suecia y sólo supera a Montenegro, Liechtenstein y Moldavia. No está clara su clasificación y la Federación, pensando en el Mundial, que organiza este país 2018, ha decidido cesar a Capello.

Los malos resultados en Brasil y la pobre fase de clasificación le han costado el cargo, aunque su continuidad resultó, incluso, un asunto de estado, ya que se debatió en el parlamento ruso y se cuestionaba su sueldo, 8 millones de euros por año.

Al final, Rusia ha decidido el despedido, sabiendo que tendrá que pagar la indemnización más alta de la historia con una cifra cercana a los 21 millones de euros.

Con todo, tal era el malestar con el seleccionador Capello que un grupo de aficionados rusos se organizó hace meses para recaudar fondos con el objetivo de facilitar su marcha y el magnate multimillonario, Alisher Usmánov, prestó este lunes 5 millones de euros a la Federación para que le echasen.