El madridismo señala a los dos grandes responsables de la derrota
El público del Bernabéu no tuvo piedad con Gareth Bale y, muy especialmente, con Iker Casillas a quien responsabilizó de tres de los cuatro goles encajados
Iker Casillas y Gareth Bale. O Gaerth Bale e Iker Casillas. El Bernabéu es soberano y ante el Shalke volvió a dictar sentencia. Los dos jugadores son culpables. El aficionado madridista se despachó a gusto con la actuación del portero y el galés que recibieron las mayores pitadas de la noche – también hubo para Coentrao, Khedira o Arbeloa-.
Especialmente sangrante fue el criterio de la grada con Iker. El portero del Madrid sigue muy cuestionado entre el respetable de Chamartín. Ante el Schalke 04, el capitán erró en los tres goles del conjunto alemán y el público se lo recordó de inmediato. En el primer tanto visitante su intento de rechace terminó dentro de su portería. Bronca. En el segundo no pudo blocar el balón y Huntelaar lo aprovechó. Bronca. Y en el tercero, Iker se quedó mirando. Y más bronca.
La afición señaló a Casillas como el gran responsable de tres de los cuatro tantos de la goleada germana y le silbaron en varias fases del partido provocando un gran revuelo en el Santiago Bernabéu que terminaría abucheando a la totalidad del once y mandado ‘recaditos’ a Ancelotti y al presidente, Florentino Pérez.
La situación de Iker en el Madrid se complica. Sus reiterados encontronazos con el público abren la puerta de salida del Real de par en par. La de Gareth Bale no es mejor: el ‘expreso de Cardiff’ –metido a cercanías- no recuerda en nada al que fue.