El cambio de cromos (posible) entre el Madrid y un grande de Europa por James
El colombiano ha entrado definitivamente en el mercado tras sus declaraciones, nada afortunadas.
Tal y como venimos contando en Don Balón, James Rodríguez ha errado sobremanera al 'rajar' totalmente a destiempo nada más conquistar el Real Madrid en Mundial de Clubes en Japón. Sus incendiarias declaraciones, en las que no aseguraba su continuidad en el club pasadas las Navidades, han enfadado a sus compañeros de equipo y a la entidad, ya que nadie se esperaba que el colombiano se descolgase con semejantes palabras nada más ganar un título. Ni su agente tenía constancia de lo que iba a hacer, y en general ha sorprendido por completo que un hombre que parecía que iba hacia arriba tras su participación más activa en los últimos encuentros haya decidido el peor de los momentos para explotar.
El caso es que las palabras colocan a Rodríguez en un panorama totalmente diferente. Por primera vez, ha admitido estar a disgusto en el Real Madrid y ha contemplado la posibilidad de irse. En el club son totalmente estrictos respecto a este tipo de hechos. Cuando un jugador desentona o dice no estar a gusto, lo mejor es enseñarle la puerta de salida. Pero los blancos tampoco están dispuestos a debilitarse en mitad de la temporada ni a regalar al futbolista, algo que también comentamos esta semana en este medio. El último de los factores que podía decidir el futuro del '10' tenía lugar este mismo martes.
La decisión definitiva del TAS de reducir a una las ventanas sin poder fichar que el Real Madrid tendrá que afrontar hace que solo en invierno tengan prohibido los blancos firmar futbolistas. Esto hace que la salida del cafetero el próximo verano sea casi segura, y por tanto se abre la veda de posibles operaciones. Una que podría llevarse a cabo estaría en París, donde el PSG tiene sus ojos puestos en el mediapunta de Cúcuta, más ahora que le ve a tiro.
Los parisinos siempre han mostrado interés por James, aunque la respuesta del Real Madrid haya sido siempre negativa. Ahora todo podría cambiar, y más aun si tenemos en cuenta que en la plantilla dirigida por Unai Emery hay jugadores que podrían interesar al Madrid. Sin ir más lejos, el defensa Marquinhos, siempre en la agenda de los merengues y del Barça, ha cobrado más interés desde que la continuidad de Pepe, que termina contrato en junio de 2017, está también en el aire. Un cambio de cromos sería posible con James de por medio, dejaría contentas a todas las partes y solventaría el eventual posible problema que se le viene encima al Madrid con su defensa.