Zidane 'cogió por banda' a James Rodríguez tras su doblete al Sevilla

Zidane 'cogió por banda' a James Rodríguez tras su doblete al Sevilla

La sintonía entre el técnico francés y el futbolista colombiano quedó patente durante el encuentro.

Era la noche, su noche. Era probablemente una de sus últimas oportunidades… y la aprovechó con creces. James Rodríguez fue el protagonista de la victoria, contundente, amplia y clara, del Real Madrid sobre el Sevilla en la ida de los octavos de final de la Copa del Rey. Con una actitud ejemplar, dos goles y ofreciendo soluciones desde el punto de vista creativo y de toque en el centro del campo, el ‘10’ demostró no solo que quiere engancharse al barco, cada vez más ilusionante, que representa el viaje de esta temporada del equipo blanco, sino que además, está para ser perfectamente titular ahora mismo.

 

Lo dijo Zidane antes del partido, en la rueda de prensa previa al mismo, la primera para él de 2017: “¿El significado de mi abrazo con James? Sí, hemos hablado. Él dijo también que quería quedarse aquí porque está en el mejor club del mundo […] Al final, James es un jugador del Madrid, es un jugador importante y me voy a comportar con él como con los demás […] Cuando tú no juegas una final estás enfadado. Yo entiendo que a veces es difícil”. Al igual que siempre, apagando fuegos e intentando convencer a todos de que no hay nada personal entre el de Cúcuta y él. Y quedó patente en el partido.

 

James

 

Rodríguez fue titular. Lejos de castigarle por sus declaraciones tras la final del Mundial de Clubes, algo que cualquier otro entrenador habría hecho y de forma totalmente loable, Zizou decidió hacer un ‘guiño’ con el cafetero y darle la oportunidad de pedir perdón sobre el césped. Le sumó al carro una vez más. Y el resultado fue fantástico. Ahora se abre un nuevo panorama de esperanza para el futbolista, siempre que sepa ser paciente y no volver a cometer los mismos errores. James debe ser consciente de que seguirán las rotaciones, de que no va a ser titular indiscutible por su juego de este miércoles.

 

El abrazo, sincero y sentido, entre el ‘10’ y Zidane al ser sustituido el primero en el segundo tiempo del partido, refleja lo que luego él mismo dijo en zona mixta: “Obviamente todos los que están en el equipo quieren siempre jugar, todos pasamos por malos momentos y ahora es un nuevo año y una nueva vida. Me quedo, me quedo…”. Después, en el vestuario, las felicitaciones del francés fueron extensibles tanto a él como al resto del grupo, pero especialmente a James. Le quiere así. Le va a necesitar.