Durant y LeBron, rotos: les dejan tirados y se ofrecen al enemigo, lío

Como viene siendo habitual en la última década, LeBron James y Kevin Durant son dos de los jugadores que más miradas tienen puestas encima en el transcurso de la NBA. Ambas estrellas registran sendas marcas anotadoras sumamente reseñables a lo largo de su carrera, amén de otro elenco de éxitos tanto individuales como colectivos, pero ahora sus respectivos equipos no generan ilusión de cara a la nueva campaña.

Tras firmar dos debacles históricas -especialmente Los Angeles Lakers- en la última temporada celebrada, ambos quieren ser candidatos al anillo, pero en las últimas horas han conocido una información que supone un duro varapalo tanto para LeBron James como para Durant: Dwight Howard y LaMarcus Aldridge, excompañeros suyos, se han ofrecido a los Boston Celtics, uno de los equipos que estarán en la lucha por el título de la NBA en la campaña venidera.

Los de Ime Udoka son los recientes finalistas de la NBA y, aunque sucumbieron ante los Warriors en las finales, su nuevo proyecto pinta a las mil maravillas. Jayson Tatum y Jaylen Brown son los buques insignias del vestuario, pero el juego interior es lo que ha supuesto un hándicap para el equipo a pesar de rozar la gloria en la última temporada.

Por ello, el técnico quiere reforzar la pintura con la llegada de uno de estos dos jugadores, dos jugadores que han decidido abandonar Los Angeles y Brooklyn para buscar un nuevo reto que sí genera la ilusión perdida en el desafío 21/22.

Cabe señalar, a tenor de lo mencionado, que ni Howard ni Aldridge se encuentran al nivel que le ha situado durante muchos años entre los mejores pívots de la NBA, pero ahora han decidido abandonar los proyectos liderados por LeBron y Durant respectivamente, y alguno de ellos acabará en uno de los grandes enemigos de Lakers y Nets en la lucha por el anillo, los mencionados Boston Celtics.

Además, Adrian Wojnarowski, periodista de ESPN, ha afirmado, dentro de esa carrera por ser finalmente el elegido, que Aldridge tiene una ventaja que le acerca al TD Garden: tiene un vínculo previo con Udoka originado durante los años en los que ambos coincidieron en San Antonio.