Los jugadores del Barça, así como el cuerpo técnico, enloquecieron con el 2-3 de Ferran Torres. El gol era fundamental para mantener vivo el objetivo de terminar la fase de liga de la Champions League entre los 8 primeros, por lo que lograr los 3 puntos, cuando parecía que el Dortmund estaba más cerca de la remontada, fue un momento mágico.

Hubo dos jugadores del equipo, sin embargo, que no se volvieron locos por el gol, enfadados por la situación que viven en el Barça de Flick. Se trata de Gavi y de Pablo Torre, que se han convertido en dos suplentes habituales, con muy pocos minutos de juego.

Gavi no entiende su ostracismo

El caso que más preocupa es el de Gavi, que ha pasado de ser unos de los referentes del Barça a ser suplente habitual, y con  muy pocos minutos. Hansi Flick ha encontrado su centro del campo ideal, formado por Marc Casadó, Pedri y Dani Olmo, por lo que Gavi se queda fuera de la ecuación.

El andaluz, suplente contra el Mallorca y el Betis, esperaba ser titular en Dortmund, ya que estaba descansado, por lo que verse de nuevo en el banquillo fue un golpe duro que provocó que estuviera serio en todo momento, intentando asimilar su nueva situación en el equipo. Flick no va a cambiar de opinión y sabe que Gavi es importante, ya que la temporada es muy larga, pero por el momento Gavi es suplente.

Pablo Torre, de más a menos

El caso de Pablo Torre es más obvio, ya que el cántabro no entra en los planes de Flick. El entrenador, que pidió la continuidad de Pablo Torre después de verle en acción en la pretemporada, se ha llevado una enorme decepción, ya que el cántabro no parece estar 100% centrado en el fútbol.

Y es que al cántabro, como han afirmado varios medios, le gusta mucho la noche de Barcelona. Flick no le daba importancia, hasta que vio como el rendimiento de Pablo Torre fue a menos. El entrenador exige máxima decisión al Barça, por lo que la situación de Pablo Torre peligra, y muy en serio.