Rechaza el dinero de Arabia Saudí porque su sueño es jugar en el Barça y espera la llamada de Joan Laporta

Una estrella mundial que no deja de recibir ofertas de los mejores equipos ha tenido la sangre fría de rechazar el dinero que le habían ofrecido desde Arabia Saudí. Porque Viktor Gyökeres está en el punto de mira de algunos conjuntos de la liga árabe, que le ponían encima de la mesa un cheque en blanco, y le aseguraban poder percibir un sueldo mucho más elevado del que tiene actualmente en las filas del Sporting de Lisboa, y del que le pueden pagar en Europa.

Pero con esto no ha bastado para poder convencer a la estrella sueca, que tiene claro que este verano abandonará Portugal después de dos temporadas muy exitosas a nivel colectivo e individual, y buscará un nuevo reto en un equipo donde pueda competir por títulos, sobre todo, por la Champions League, y donde pueda jugar en una de las grandes ligas del continente. Y se ha estado hablando mucho acerca de su posible desembarco en el Arsenal.

Una posibilidad, que, de momento, no se ha acabado de concretar, si bien existen conversaciones en marcha entre ambas partes desde hace ya algún tiempo. Mikel Arteta está obsesionado con solucionar los problemas de puntería que llevan exhibiendo en los últimos años, y está dispuesto a pagar todo lo que sea necesario por el crack nacido en el año 1998, que, dicho sea de paso, tampoco tiene un precio especialmente elevado, pues no costaría más de 70 millones de euros.

Gracias al pacto que alcanzó con su actual club, le permitirán hacer las maletas por una cifra más reducida de la que está estipulada en su cláusula de rescisión, que es de unos 80 ‘kilos’. Sin embargo, el sueño de Gyökeres es el de aterrizar en el Barça, el conjunto al que apoya desde que era apenas un crío, y donde le llama mucho la atención poder convertirse en el sucesor de Robert Lewandowski, uno de sus referentes, y al que le buscan un recambio fiable.

Confía en poder recibir pronto la llamada de Joan Laporta, y ser el elegido para mejorar la parcela ofensiva del Spotify Camp Nou, lo que ha sido un aliciente importante para atreverse a rechazar el dinero de Arabia.